lunes, 28 de diciembre de 2020

RÉCORD ABSOLUTO EN PILLAJE Y ESCAMOTEO.

 Entre los peones que le hacen la brega al novedoso sistema político (la Democracia) que tan chungo (cuidado lo caro que nos está resultando a los españoles), más conocidos como militantes (sálvese quien pueda) de los partidos por el sistema instalados, hay por encima del resto de los demás partidos y por encima del resto de los militantes, dos unidades cuyos militantes luchan igualadísimos en la primera posición, récord absoluto en Europa, en arte del escapismo monetario, en el pillaje y en el escamoteo que son el PSOE y, como imprescindible pareja en el baile del rigodón mamón, los simplicios bobaillas del PP.

Claro que no; nadie puede ser tan memo como para pensar que, por unas pocas presencias de políticos (denunciadas "sotto voce" por sus propios conmilitones, para deshacerse de molestos testigos) aireadas por los medios y puestas de cualquier modo ante la Justicia (puro disimulo), cesarían los ataque de los políticos a nuestros dineros y pudiera ser que también desaparecería la actual podredumbre, dejando vía libre a las ideas inteligentes, a la honradez y a las personas capaces de llevar a buen fin inversiones con rendimiento positivo.

En el reportaje al que aludo; entre los muchos casos que presenta esa emisora de televisión, desde el primer día que lo vi, me llamó la atención ver el gran proyecto de "La Ciudad de la Cultura o Gallaecia Petrea" en Santiago de Compostela, puesto en costosa marcha, pulverizando su primer presupuesto (300 millones de euros gastado y dos edificios sin iniciar, de los seis previstos) por don Manuel Fraga Iribarne, tal vez recordando cuando se ponían las primeras piedras de las impresionante obras que se realizaron durante el gobierno del "antiguo régimen", siendo el señor Fraga, reciclado demócrata, ministro (camisa azul Mahón) de Información y Turismo. Él conseguiría con su gran proyecto en la hermosísima Galicia, laminar la impresionante estética de los muy importantes embalses; colosales moles de hormigón necesarias para crear la necesaria energía que pusiera en marcha la futura industria, prácticamente desconocida en España, que ayudara a salir de la pobreza acumulada en tantos años de Monarquía; periodo republirojo y los tres años de contienda. Lagos cuyas aguas sirvieran para que muchos eriales se convirtieran en fértiles campos de regadío; fértiles vegas donde criar vegetales comestibles; aguas dominadas para el uso doméstico en las viviendas. Muchas centenas de miles de viviendas levantadas por La Obra Sindical del Hogar, teniendo en cuenta la economía de para quienes se edificaron.

("Esta casa goza de los beneficios del decreto ley del 27 de noviembre de 1953 y es de renta limitada". O: "Edificio construido al amparo del régimen de Viviendas de Protección Oficial". Los mensajes de estas placas tenían una función: recordar a todos los vecinos de España que el régimen franquista se tomaba muy en serio la vivienda social").  

También conviene recordar que se edificaron viviendas sociales por el ministerio de la Vivienda, siendo don José Luis Arrese, Falangista, el ministro; se levantaron grandes hospitales puestos al servicio de los trabajadores españoles en muchas, quizás todas las capitales regionales.

La diferencia, que no calculó don Manuel (engañado por su experiencia franquista) es que aquellas obras, sin ayudas de organizaciones extranjeras (ahora se las van a dar a Sánchez para que siga presumiendo de pobre) se realizaron, ahí están cumpliendo con el cometido por el que fueron realizadas, no quedaron malamente paradas; degenerándose sin la menor posibilidad de alcanzar a ser acabadas por nadie, para su disfrute por los quienes las hemos pagado. Y lo peor es que aún inacabadas, ejemplo del derrochador ensueño de unos virreyezuelos de ópera bufa; sin dar ninguno de los servicios previstos, seguiremos pagando su alto coste. El coste de esas y de las futuras que están al caer.

Eloy R. Mirayo.



lunes, 21 de diciembre de 2020

"ACOJONATUS SUMUS"

 El constante advenimiento de científicos, expertos virólogos en el conocimiento y seguimiento de las jodidas andanzas de los virus, con o sin corona, a los medios de comunicación, lejos de aclararle al personal las grandísimas dudas que le provoca el desconocimiento de asunto tan alejado de su mente, lo que están logrando, no sé con qué interés, es tenernos a los legos en la materia viral, totalmente acojonatis; mirando con recelo a todas las partes; desprovistos (¡qué tiene huevos!) hasta del deseo de tener contacto familiar. Padres e hijos sin poderse abrazar, abuelos y nietos que se huyen hasta el punto de prohibirse mutuamente las visitas en estas fiestas tan entrañables. Y son capaces de pasarlas en la más estricta soledad, sin brotarles una sola lágrima de sus ojos.

Me cuentan que un asustado marido que atento sigue lo que le cuentan esos expertos en los periódicos, las emisoras de radio y la tele -pasa de uno a otro medio con la rapidez del rayo- muy atemorizado por la posibilidad de contagio, le compró a su mujer -o compañera sentimental, no me lo aclararon- un traje de Neopreno, con escafandra hermética, agujerico estratégicamente hecho en el lugar preciso, con el hueco justo de presión por donde poder penetrarla con la seguridad de que, al recoger velas, no va a salir infectado.

Dejando a un lado las exageraciones que siempre y en todo las hay (existen quienes dejaron de usar el cigarrillo electrónico por miedo a electrocutarse), lo cierto es que esos expertos tan noticiosos; que manejan palabras tan incomprensibles lejos de la Virología, deberían hacer, antes de explayarse en los medios de comunicación, un examen de para quien está a punto de salir ofreciendo con idioma científico sus bastos conocimientos profesionales. Pero ¿ya estaba dicho todo; señalado el letal peligro; descubiertas todas las maneras de transmisión? ¡Ni hablar del peluquín! En una tele de presencia nacional, aparece esta mañana otro virólogo -para mí desconocido; seguro que no para la Ciencia- que al socaire de la aparición de una nueva cepa del coronavirus (Covid-19), hurgando en el acojonatis casi unánime del país, nos avisa, con una cuasi cínica sonrisa en la cara, de su facilidad y rapidez de contagio. Y, como una amenaza, aventura la posibilidad real de que se produzcan muchos contagios por el encuentro familiar la Noche Buena que, sin dar aún pruebas de contagio, se ampliarán con la celebración de Nuevo Año; y que, con motivo de la Epifanía (la llegada de los reyes Magos, sus cabalgatas) las infecciones sumadas podrían constituir la aparición de la tercera ola de la Pandemia.

A mí me importa una higa la forma que en un microscopio de grandes aumentos pueda ofrecer el jodido "bicho". ¿Pa qué? Personalmente (y creo que en esa estamos la gran mayoría de los españoles) no me sirve de nada práctico el haber escuchado y lógicamente mal entendido, que para algunas personas, la actuación del Covid en su organismo, provoca una especie de explosión que, afectando a casi todos los órganos vitales, en la mayoría de los casos, se lleva por delante la vida del infectado.

Lo que nos interesa saber a todos los que no somos profesionales sanitarios, incluidos los investigadores, es que por fin se ha encontrado la manera de pelear con éxito contra ese virus tan asesino, nacido quién sabe en dónde y por qué.

Lo que nos interesa, a todos, es que de una puñetera vez podamos volver a salir a la calle sin miedo al contagio de algo así; que podamos salir a pasear volviendo a disfrutar, viendo en su totalidad la cara de nuestras bellísimas mujeres, envidia del mundo entero.

Lo que estamos deseando todos, sin excepción, es poder asistir a las salas de cine o de teatro; a conciertos; a corridas de toros; a eventos deportivos, etc., sin más temor que aquel que pueda crear la calidad de actores y actrices; músicos; toreros y por supuesto, los toros; o los deportistas.

Y el colmo del disfrute sería que, juntándonos todos y con el mismo tono de voz, les dijésemos ¡Hasta nunca! a este caterva de malvados inútiles que están consiguiendo la general ruina de España.

Eloy R. Mirayo.




jueves, 17 de diciembre de 2020

ASNÉCDOTAS.

 Estas cosas que dice Sánchez no dejan de ser una asnécdota de las muchas asnécdotas que, por no tener mejores herramientas intelectuales, son las que acostumbra manejar para sazonar y dar "lustre" a sus típicos y tópicos parlamentos en las Cortes, al debatir con los grupos de la Oposición. 

¡Que son la Oposición! señor Sánchez; son la oposición por mandato de las urnas, con la obligación de vigilar que usted -lo que no dejaría de ser un milagro- se comporte como presidente del gobierno de España. Por lo que debería comprender que a estos no se les puede "comprar" -por lo menos a VOX- de ninguna de las maneras posibles, incluyendo los abalorios, como normalmente ha venidos haciendo con los "diablos rojos" y los "indios" que le sustentan en el Poder.



Es elegante el señor Sánchez, si es que alguien lo dudaba, no había más que verle detrás del "mostrador" del Hemiciclo, con la mano derecha metida en el bolsillo del pantalón, sabrá Dios lo que se estaría tocando, como cualquier asiduo "tabernícola" a quien aún no le habían servido la copa, menospreciando con él asnecdótico insulto de "asilvestrados", a los partidos opositores, simplemente por no seguirle en su asnecdótico troteo a la cabeza de su reba... (¡Huy...!, casi se me escapa) sus mesnadas, por las escabrosas sendas de equívocos paisajes y, por si eso no fuera suficiente, con tan malísimas compañías. ¿Qué persona seria querría acompañarle?.

Lo más hilarante es de lo que se quejan algunos hinchas del "sanchismo". Se duelen de que su líder, por culpa del PP y de VOX, se tenga que poner, para seguir en la presidencia, en manos "indeseables". 

Yo, que no quiero verme ante un fiscal, no soy así pero, es lógico pensar que entre cuarenta y siete millones de españoles haya quien tenga dificultades para establecer en ese trato, quien es el deseado y quienes son los indeseables. Todos conocemos la sabia sentencia de El Gallo cundo dijo aquello de... "Hay gente pa tó".

No solamente es asnecdoteador el presidente Sánchez, pues en toda la masa gubernamental el ser asnecdotario y asnecdoteador es algo de lo que muy pocos y pocas puedan condolerse de no serlo.

Una buena asnécdota fue la actuación de José Luis Ábalos en el aeropuerto de Barajas, y las maletas de la vicepresidenta venezolana. También fue una buena asnécdota, a dos bandas, la que interpretaron a la vista de todos los que por allí pasaban, la ministra María José Montero y el vicepresidente Iglesias (el Lenin español y muchiduque de Galapagar) en los pasillos de Congreso de los Diputados hace unos pocos días.


Eso sí que todos los españoles debemos valorar muy alto. El presidente Sánchez, ante su probada incapacidad, ha decidido poner en manos de las autonomías el control de Covid-19.

El anticipado regalo de Reyes. El Illa y el Simón van a seguir... Pues vaya mierda de regalo.

Si lo que está pasando en España estuviera pasando en otro país, más o menos próximo, no dejaría de ser para nosotros más que algo absolutamente anecdótico. 

Eloy R. Mirayo.


miércoles, 16 de diciembre de 2020

PODRÍA OCURRIR.

¡Clarito que podría ocurrir! España es un país singular, que es muy apreciado por muchos millones de personas del otro lado de sus fronteras, además de por su variedad y belleza, sus cocinas y sus bodegas, por haber sido capaz de alumbrar seres humanos de gran notoriedad a nivel mundial, así como: Trajano,  Séneca, Viriato, Isabel I (la Católica), Santa Teresa de Jesús, Francisco de Goya, Diego Velázquez, Francisco de Quevedo, Santiago Ramón y Cajal, Agustina de Aragón, Concepción Arenal y... Ramoncin. ¿Ramoncin? Si, si; Ramoncin... Ramoncin. Ellos y ellas son personajes históricos que junto a otros muchos están recogidos en una interminable lista de extraordinarias personalidades hispanas, que al no estar cerrada, lo mismo cualquier día de estos el Presidente Sánchez va, y nos deja a todos los españoles -los actuales y futuros-, turulatitos perdios, ante la impensable hazaña de haberse hecho un hueco entre esa maravillosa nómina de celebridades, al alcanzar el mérito personal de haber descubierto su desconocida capacidad, la que dormitaba en lo más profundo de su cerebelo, de poder tener, y haber tenido, una idea. No de las importadas del exterior, de las que tanto blasonan él y sus allegados gubernamentales, como si fueran propias.

-¡Va...va...va...va!- me dice incrédulo mi amigo Evaristo-. Para devanarse los sesos ya tiene una legión de asesores pagados a muchos miles de euros el kilo. Por cierto, el otro día en una carnicería he visto una pieza de chuletones a 41 euros el kilo ¿serían los costillares  de alguno de ellos?.

Un poco cerril es mi amigo; es socialista, anti Sánchez.

Pero entre tanto que se le pueda encender la bombilla, aunque no sea una idea luminosa ya se le podría ocurrir, como se hace en el resto de Europa, tratar de que funcione adecuadamente, poniendo los medios necesarios, en primer lugar, sin olvidarse de otras cosas, de normalizar la función pública en cuanto a poner al día los pagos a quienes están en los ERTES y a quienes están esperando el cobro de los subsidios. Mire usted, señor Sánchez; y usted también señor Escrivá. Esas personas a las que les tienen durante varios meses esperando, tienen el mismo derecho que ustedes: cobrar sus ayudas, con la misma puntualidad que ustedes sus sueldos. Con la diferencia de que las cantidades; las de ellos apenas alcanzan para mal comer. Vergüenza debería darles, con todo su golpe de socialistas, cundo echen la vista en la cifra que en sus cuentas bancarias les han ingresado. Deberían hacer comparaciones. ¡Imiten! Ya que no son capaces de otra cosa, a esos países que se están esforzando en preservar su maquinaria económica, cuidando del mantenimiento hasta de los pequeños industriales, de los comercios y de los autónomos. Esos que están empezando a ser considerados "como algo del pasado". Cuando esta gente se vaya, está claro que dejara a España como un sembrado después de la recogida del cereal; como un páramo huérfano de vegetación, incomodo hasta para las hormigas, peor de como fueron dejando, cuál "tierra quemada", los lugares que ocuparon, huyendo -perdiendo el culo, como asustadas liebres- del avance de los Nacionales, durante nuestra guerra de Liberación.

Estos rojos y semi rojos, igual que aquellos que conocieron nuestros abuelos y padres, como estos que están conociendo nuestros hijos y nuestros nietos (alguno de nosotros conocimos a ambos; yo, por edad, no les conocí pero les padecí) es tropa con cerebro unidireccional, están negados para la creación, pero son auténticos artistas de la infecciosa destrucción. Si serán destructivo que, en su estado de normalidad, sin recibir impulso de la "afición", uno, de cargarse al PCE, y el otro, al PSOE. Vale; este aún está en la tarea. Espero verlo.

Eloy R. Mirayo.



martes, 15 de diciembre de 2020

YA NI PARECE SORPRENDER A NADIE.

Cada día va siendo más difícil encontrar un nuevo motivo de crítica a este gobierno socialcomunista. Se les escucha hablar (bueno... como ellos se expresan), al presidente o a cualquiera de su estado mayor y no se encuentra en sus discursos una novedosa maldad que no haya sido perpetrada con anterioridad. La bien argumentada crítica en los medios de comunicación que no han sido "beneficiados" por la propaganda institucional, a pesar de su veracidad, lo cierto es que para el ciudadano que les sigue, es posible que le empiece a sonar como el Bolero, de Maurice Ravel: muy monótona. 

No es culpa de esos esforzados -y hasta perseguidos- medios de comunicación que siguen con vocación didáctica denunciando cada uno de los despropósitos, barbaridades, cacicadas y gilipolleces a granel que últimamente se han venido cometiendo diariamente en este país, España, por políticos envanecidos por el Poder, sino porque desde hace un tiempo, se están quedando sin labor distinta de la que se ven obligados a seguir manejando, porque quienes nutren de ese imprescindible "material", no producen absolutamente nada, por haber dejado devastado el horizonte de posibles nuevos despropósitos, barbaridades y cacicadas. Las gilipolleces... No; son consustanciales con su personalidad.

No cabe duda de que eso es un asunto que por su rareza dentro del núcleo europeísta, debe estar siendo estudiado en profundidad y firmeza, con el ojo vigilante y con las propias herramientas: el compás y la escuadra, en la Sede Central de la Unión Europea. 

A los españoles no nos queda otra que esperar a lo que nos venga del otro lado de los Pirineos. 

Si por fin lo que llega de las frías tierras es la limosna que nos ha concedido la Unión Europea... Al menos nos alegrará el animo saber que pronto veremos nuevos millonarios que sin conocimientos laborales, industriales o científicos que pudieran servir de aval a su riqueza, lo habrá logrado "con los magros ingresos que da la política".

Lo de aquí, ya ni parece sorprender a nadie ni, por lo que estamos viendo, llega a cabrear seriamente a alguien.

Quizás sea, digo yo, que los españoles y españolas además de la anual contra la Gripe, estamos vacunados -sin derecho a decir, ni pío- contra los ataques a los más naturales derechos y principios; contra las prohibiciones y vetos; contra garrulas cacicadas; contra hijoputicas cabronadas; y hasta contra las múltiples mariconadas y soplapolleces que han de soportarse por haber encendido ciertas pantallas televisivas o por conectarse con ciertas emisoras de radio de las que han sido debidamente engrasadas por las subvenciones del Gobierno o a través de la publicidad institucional.

No creo que decir que este gobierno, con su irregular proceder (no sé si habrá tribunales que lo lleguen a juzgar) ha terminado con su capacidad de crear nuevas nocivas anormalidades, sin quitar vigencia a las ya establecidas, sea una exageración mía, alejada de la realidad. Lo único que a estas alturas vemos que hace, en ese sentido, es engordar las  barbaridades que ya ha cometido. No; no voy a poner ningún ejemplo, porque son tantos que solamente pensar en traer uno, me da la risa nerviosa. 

Todos las tenemos bien presentes en nuestra memoria e insisto: sería una grandísima pena no encontrar un tribunal que en un futuro próximo, llegara a cuantificar y calificar la actuación de este gobierno, "colocando" a cada cual en el lugar que le corresponda, de acuerdo a su participación.

 Jesusito de mi vida ¡Que llegue antes de que se cepillan malamente a la Justicia!.

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No es bueno dejar sin acusar recibo: el candidato a la presidencia del Club de Fútbol Barcelona, el señor Juan Laporta, ha colocado cerca del Estadio Bernabéu un cartel propagandístico con su fotografía. Así es su estilo; ese es el "hierro" en su anca: escandalizar (¡teniendo aquí este gobierno!). Pero el tiro le ha salido por la culata. Mira, Juanito, Madrid es así: puerto abierto que con el cariño que se merecen, recibe a los españoles de otras provincias, sin condiciones previas y sin pedirles renuncias, que quieren venir a visitarnos, o que desean residir aquí. Y también los madrileños, educados en esos buenos principios, somos respetuosos con los animales, motivo por el que, con las lógicas diferencias, recibimos igual a las personas que a los animales.  

Eloy R. Mirayo.


lunes, 14 de diciembre de 2020

LA HISTORIA SE REPITE.

 23 de febrero de 1981. 

La historia se repite porque aquel proyecto les salió a las mil maravillas; un casi perfecto ¡abracadabra! circense; una vuelta a la tortilla -sin huevos- que después de varias vueltas en el aire al caer plana y plena sobre la sartén les está resultando la mar de rentable. De ella comieron y siguen comiendo quienes, imitando a Maquiavelo en estado de gracia, lo pergeñaron, y pusieron en marcha utilizando como vaselina de la fina para su penetración, a los pasilleros de acá para allá "maleables residuos" que como excremento residual generó el culo del Movimiento Nacional; también comieron, estos "contantes y sonantes" dineros, los hambrientos bolsillos de los políticos recién paridos por la Democracia (algunos con el desteñido azul mahón aún fresco sobre sus carnes y otros, cubriéndose con la obrera pana, pero sin callos en las manos); los inútiles que accedieron a un escaño, por ser reses de partido, no porque fueran los mejores y tuvieran cosas que aportar, sino por no tener mejor herramienta para ganarse la vida. Y ¡cómo no! también los "parteros", personajes orondos que ocultos en las sombras les ayudaron a nacer y ¡hala! Allí les pusieron.

Desde esa posición en la gran mesa repleta de vituallas de esta Democracia; desde aquel mismo instante se vienen repartiendo sus ricos manjares a padres (¿verdad señorito Errejon?) de los políticos -de los que les tuvieren-, para los maridos y las maridas, queridos y queridas, según por donde se busque al gusto: por la Proa o por la Popa, hermanos y hermanas, hijos e hijas y... ¡Claro que si! Los allegados. Esas criaturitas a las que estos necios -a los que la mayoría silenciosa les señalaría de gilipollas- les han quitado la natural denominación de origen: parejos, parejas sentimentales; follamigas o follamigos. Títulos nobiliarios de la rijosa nueva aristocracia que ya resultan muy reconocibles para cualquier hijo de vecino, aunque nada más se sea una persona normal.

Las segundas partes, dicen que ocurre nunca fueron buenas -menos la del Padrino-. También para la maldad se necesita, si se quiere de verdad hacer daño, utilizar la inteligencia con eficacia. Tremendo contratiempo; de eso, mira tú qué cosa, queda poco... Casi ná y menos, que diría el flamenco.

Aquel 23-F, se montó, aceptémoslo, alcanzando con total éxito las dos metas propuesta: cepillarse al Ejercito vocacional y patriótico, a sus generales y demás oficiales de prestigio, sustituyéndole por un Ejercito funcionarial y con sordina, en manos de políticos; prestigiar la Democracia, como su vencedora. Y como propina: subir a los altares democráticos a don Juan Carlos I.

El nuevo proyecto corrector: 23-F bis, sin los mimbres de aquellos genios malignos que, como directores profesionales, dirigieron aquella película. Estos minundis la han hecho nacer de cualquier manera; lejos de aquella superproducción -como los antiguos títeres rurales-. Y es que ni exprimiendo con tesón el conjunto total del cerebro de la tropilla gubernativa, se podría sacar la suficiente inteligencia necesaria para hacer un aceptable remake. 

No les da para más. Ese es el motivo por el que han sustituido la presencia en el filme del general don Jaime Miláns del Bosch, por unos ex militares añosos, varios de ellos jubilados hace décadas de sus obligaciones cuarteleras, como "peligrosos golpistas" amenazadores de la democrática convivencia nacional y del tan trabajosamente logrado Estado del Bien Estar.

Muy desesperado ha de andar este gobierno que camina a dos patas (socialistas y comunistas) que preside el jacarorítmico Sánchez, para utilizar la candidez -¡mandar una carta al Rey, don Felipe de Borbón, con preocupaciones patrióticas!- de unos ex militares cuya actual misión diaria, la de alguno de ellos, es sacar cada mañana a su mascota canina a hacer "sus cositas" en la calle. Ex militares que ya cambiaron el sable por el bastón -alguno de ellos para mantener el recuerdo de su marcialidad-, y que también cambiaron el traje de campaña y las recias botas, por la bata de andar por casa, unas cómodas y cálidas pantuflas. También parece que cambiaron el sentido común, por una estúpida esperanza.

Eloy R. Mirayo.



jueves, 3 de diciembre de 2020

EL VACÍO QUE DEJAN.

No se debe dejar pasar la ocasión de criticar con la mayor dureza que uno pueda apostar en el envite, aunque ya se haya hecho varias veces con anterioridad, la herida sigue sangrando y el dolor en vez de calmar, se va agudizando. 

Don Manuel Giménez, Consejero de Economía y Competitividad de la Comunidad Autónoma de Madrid, tiene el enorme descaro y la gran desvergüenza política de hacer público que: "los centros comerciales son grandes generadores de empleo y motores económicos que en nuestra región dan trabajo a 140.000 personas". 

Admitiendo que esa cifra sea cierta -que ya es tener, más que buena, voluntad franciscana para llegar a admitir como verdad lo que dice un político- no  creo que sea algo tan espectacular como para que los madrileños cojamos el trompetín, el bombo, las castañuelas y, enloquecidos por la alegría, nos liemos a dar saltos y zapatetas.

Este señor Giménez asegura que la evolución de estos, para él, sagrados templos del comercio, por lo que les pondera, pasa por el "retail experiencia" porque quien se acerca a uno de ellos "busca algo más que realizar una compra, demanda experiencias que compartir". 

¡Échale hilo a la cometa, Ninchi, que nos está llevando el viento! Yo, lo único que he compartido en una gran extensión comercial, y no he experimentado una especial experiencia, ha sido el dinero que llevaba en la cartera. 

Según el Consejero Giménez, ya existen en la Comunidad de Madrid cien de esos centros comerciales que entre todos ellos reúnen 9.400 establecimientos con una representación territorial del 19,5%  en la región y el 17,8 de los centros que están funcionando en toda España.

Esto lo dijo en la inauguración de la jornada El Futuro de los Nuevos Espacios Comerciales, organizado por el diario El Economista.

Lo que supone que todo comerciante que valerosamente, después del desastre de 2008 aún resiste, al abrir diariamente la puerta de su humilde negocio, lo haga temiendo que esa apertura pudiera ser la última, como ya les ha pasado, a 22 comercios, de media diaria, en los últimos cuatro años, lo que supone, solamente en Madrid, el tambaleo del 7% de su PIB, sin contar en lo que afecta al total de la región.

Pero no es que los grandes centros comerciales estén arruinando a los pequeños comerciantes, sino que junto a ellos también entran en ruina los dueños de los locales comerciales que dejan de estar alquilados y pierden, en muchos casos, de forma total sus imprescindibles ingresos, sin posibilidad de poderlos volver a alquilar. 

El descaro del político, de manera general; su capacidad de esconder la tragedia por él mismo ocasionada (la permisibilidad de instalarse dentro del casco urbano a esos centros comerciales y, más tarde, la señora Esperanza Aguirre, liberalizando los horarios comerciales y a conveniencia los días de apertura, algunos, los 365 días del año) tras unos números engrandecidos artificialmente para ocultar el daño causado, es digna de oculistas del tamaño del "Gran Houdini".

Eso es lo que hace el Consejero Giménez, obviando las cifras de pequeños y medianos comercios que se cierran, muchos con más de cien años de antigüedad, y el tanto por ciento de superficie comercial que desaparece con ello. Tampoco tasa el porcentaje negativo que representa en la región; ni el vacío que deja en las calles de muchísimos pueblos.

Lo que a los políticos les da igual (los de la cobarde derechita o los rojos y los rojazos) es el futuro de esos pequeños talleres y de esos sencillos comercios, que juntos crean el mayor número de empleos, a base de mucho sacrificio y poco beneficio. ¿Su lógica? Muy sencilla ¡Qué pueden darnos esos desgraciados! Pues, eso.

Eloy R. Mirayo.



miércoles, 2 de diciembre de 2020

EL VACÍO INFORMATIVO DEJA PASO A LA MENTIRA INTERESADA.

 Se van sucediendo las hornadas de veinteañeros de ambos sexos y me da la sensación de que no hubo ni hay nadie en la enseñanza estatal, en la privada o en la religiosa, que se tomen la molestia de informarles con datos fidedignos, de lo que ocurrió en España durante los años 1931-1939, como contrapunto de la verdad sobre el malicioso sonido de la mentira oficial, cada día más fuertemente instalada en España. 

No existe ningún libro de texto en activo que de explicación -ni siquiera de forma breve- sobre lo que estuvo pasando en España alrededor de la irregular proclamación de la II Republica. 

Tampoco existe un libro de texto en activo que explique lo que sucedió en la retaguardia de las ciudades y pueblos que quedaron en la autodenominada "zona roja". Como tampoco existe un libro de texto en activo que recoja con fidelidad los "por qué", por los que se llegó a tan rudo enfrentamiento entre españoles. Y, aunque los hubiera, no parece que haya docentes honrados y decentes que se sientan interesados en explicar a sus discípulos -colegiales o universitarios-, cual fue el detonante que llevó al enfrentamiento entre españoles. 

Nadie, desde la enseñanza, aún estando en desacuerdo, se expone a enfrentarse a lo que en esa materia se ha venido usando en las aulas de colegios y universidades, con la aquiescencia de los distintos gobiernos habidos en este traumático periplo democrático, tan opaco, tan inmoral, tan repulsivo y tan  anti patriótico, en el que a los políticos, con escasas excepciones -que alguien me las señale- se les ve que están más por intereses ideológicos y por sus propios intereses económicos, que por los legítimos de las personas a quienes se comprometieron a gobernar:

("Juráis o prometéis por vuestra conciencia y honor cumplir fielmente con las obligaciones del cargo..." Esa es la fórmula de acatamiento a la Constitución que se les exige a los altos cargos del gobierno de este país que, como es notorio, muy pocos cumplen. Y, ese viejo cromo propagandístico que veis abajo, nos muestra cómo son cuando "llegan" nuestros políticos, y como han cambiado cuando salen).

Lo que me ha llevado a esta reflexión ha sido lo que el nieto de un  divisionario amigo mío, ya fallecido, me dijo de su abuelo, y del total de los voluntarios de la División Azul: mi abuelo y todos los demás de la División Azul, fueron unos "chalaos" que marcharon a guerrear con el nazi Hitler.

Pero es que no solo es la opinión de ese joven, más aficionado a matar alienígenas en la pantalla de su "iPhone" que en tomar un libro en sus manos y tratar de analizar aquello que le llega al cerebro a través de sus ojos. Lo malo es que esa deformada opinión ha hecho nido en el cerebro de la casi totalidad de la juventud, buena, o no tanto, española, por la falta de una veraz información.

Ese vacío informativo deja paso a la mentira interesada de las Izquierdas españolas, para ensuciar la generosa entrega de aquellos voluntarios, mezclándoles con el nazismo: "se fueron a luchar con Hitler".

Eso es una fotografía falsa. Eso es una secuencia cinematográfica a la que se le ha quitado el sonido, y se le sustituye por uno a conveniencia. La toma es real, su encuadramiento e indumentaria no ofrecen la menor duda. 

Lo que les diferencia de manera absoluta del resto de los soldados del Tercer Reich, es que los divisionarios españoles se ofrecieron voluntarios para seguirle pegando al Comunismo; todos ellos quisieron reengancharse en la tarea de seguirle sacudiendo al monstruo en su propio terreno.

Hay que crear "cátedra" y, por los pocos medios informativos que resisten en una situación de casi clandestinidad, dejar claro que la División Azul no luchó a favor de Hitler, sino en contra del criminal Stalin, que tanto horror había causado en nuestra patria, sin distinción de clases o ideales políticos (de lo que hay documentos que lo atestiguan)

Eloy R. Mirayo.