miércoles, 11 de marzo de 2020

GARANTÍA DE URNAS LLENAS DE VOTOS.

Es bastante más probable el triunfo de quien se postula para la trascendental empresa de gobernar un país rodeándose de los mejores -pero ni así es seguro- que el triunfo de quien se empeña en hacer lo mismo, él desnudito de atributos intelectuales, como un recién parido -nos quedamos ahí, para no sacar el tema de la Moral; la Ética; la Estética; la Lealtad; también la Humildad- y, para completar el grupo, querer reunirse con lo que buenamente se encuentre rebuscando en los tenduchos de un mercadillo callejero, donde todo lo que se vende es "género de más que sospechosa autenticidad". Cosa que a él no le afecta pues su necedad hace que al levantarse de la cama; enfrentándose al espejo del armario ropero, este le devuelva la imagen de un chavalote moreno de brillante y ondulado, sin llegar al rizo, cabello rubio; que se eleva del suelo con ascendentes centímetros en fila india, uno seguidito de otro, hasta completar un físico de ciento noventa y algún que otro más; musculoso, pero no con el exceso de oso; 

adornado como un arbolito de Navidad, con dos refulgentes ojos verdes, que te quiero verde, que quitan el hipo y enloquecen a chicos y chicas LGTBI, uno -de los ojos- a cada lado de la "cesarial" nariz y que, para mayor gloria, además de todo lo reseñado, se congratula de ser portador de un rostro atractivo y molón, encerrado en los límites aduaneros que marcan los cabellos, por el Norte; la barbilla, por el Sur, y una oreja por el Este y la otra por el Oeste, que se ilumina -como un anuncio de la Coca Cola- con una sonrisa seductora que te cagas, garantía de urnas llenas de votos en cada cita electoral.

Ante semejante visión, ahí tenemos a quien no dudó ni un segundo en lanzarse al estrellato sin reparar que por no tener, ni siquiera tiene la capacidad de saber medir la trascendencia de esa empresa en la que se ha metido él, en compañía de las "prendas" de la rebusca en el mercadillo humano.

Lo malo es que esta clase de gilipollas que aparecen por milagro del maligno en altísimos lugares, sin tener los conocimientos necesarios, es que las consecuencias; el alto costo de sus estúpidas acciones: la desaparición de empresas, el crecimiento del paro, el endeudamiento de la nación, el empobrecimiento de la sociedad, el desenfrenado e improductivo despilfarro; ellos, el gilipollas que les manda al resto de gilipollas, cuando por fin se van, lo hacen

con "lo ganado", sin que exista nada ni nadie, ni si siquiera la Jefatura del Estado, que le propine el "repaso" que se les debería aplicar.

Eloy R. Mirayo.

martes, 10 de marzo de 2020

SOCIEDAD DÓCIL.

Una sociedad atemorizada es una sociedad dócil, que aguanta sin el menor deseo de rebelarse; es una sumisa potencia laboral fácil de pastorear y el beneficio que se saca de su sacrificio, menos las migajas con las que se la mal alimenta, va a las insaciables arcas de una oculta secta que con sus larguísimos tentáculos, oprime y extrae el jugo de cuantos estamos en este mundo.

Su producción de terror es como una especie de corriente continua que, cuando el "susto" anterior empieza a perder fuerza, aparece otro "susto" de iguales o mayores proporciones que viene a dar continuidad.

Para mantener el terror procurando que su flujo no sufra una especie de polvo interruptus, como para procurar la continuidad de culto a una religión, es necesario mantener un ejército suficientemente nutrido de "sacerdotes" y "sacerdotisas" (en el caso que nos ocupa, laicos) muy bien preparado y debidamente "engrasado" 

que hagan la imprescindible labor de proselitismo.

En estos momentos el "susto" que de alguna manera pone sordina al cambio climático, es la aparición del coronavirus, que está infectando al mundo entero, con sus fatales consecuencias, de manera especial entre las personas mayores (los que somos viejos), los enfermos crónicos de las vías respiratorias y quienes desafortunadamente sufren enfermedades graves igualmente crónicas que afectan a las vísceras más vitales.

No mantenía, por lo que parece, la cosa del clima el nivel exigido por el mando, y alguien de los que de veras mandan -¡vaya usted a saber quién!, pero no estos gilipollas que ni para eso valen-, le ha pegado la "pata Charlot al nido del bichito" 

y ya se ha establecido, en el primer mundo (los otros mundos no importan ni interesan a nadie), una crisis económica de tres pares de cojones, que dejará en ridículo a la que montaron hace  doce años (2008), y que desgraciadamente ampliará de manera exponencial las cifras de parados y el número de sus pobres, que son suyos porque ellos así lo decidieron con su egoísmo y rapiña, en la misma proporción que como ¡grandísimos hijos de puta!, con la desgracia de los demás ellos, los de siempre, los escondidos tras la bruma, llenarán nuevas arcas y, como no, también a esos que aparecen pavoneándose en las listas de los especuladores más ricos del Mundo.

En los próximos días, meses y años, nos iremos enterando de cuantas importantes empresas industriales, comerciales y de servicios han cambiado de manos, y hasta de nombre. Lo que no habrá cambiado es la ruta por donde se nos van a las personas decentes, entre los que no hay un solo político, los pocos euros que se nos permite "cultivar".

Eloy R. Mirayo.



lunes, 9 de marzo de 2020

ROMERÍA GROSERA Y PROCAZ

¿De dónde ha salido toda esta chusma? Es lo que nos preguntamos las personas sencillas, cuando los oímos expresarse a través de las emisoras de radio o por las distintas televisiones que además de escucharlos, tenemos “la suerte” de verles, a ellos como a ellas, sus caretos y su patibulario aspecto. 

¿De dónde salieron? ¿lo sabéis ustedes vosotros? Yo tampoco, como creo haber dejado claro, pero no solo estoy ignorante en cuanto de donde han salido los políticos del concubinato político y sus necesarias escurriduras, que también lo soy, me encantaría dejar de serlo, si encontrara algún alma caritativa que estuviera dispuesto a hacerme saber de qué infame galaxia han aterrizado esas gentes, y esas otras que demuestran escasa moral, rara ética y siempre muy continuamente se les ve muy interesadas, en sacar tajada -las mejores, por supuesto- de todo lo que se mueva; si no hay movimiento, se les ve que son expertos en darle cuerda al mono para que baile al son que ellos marcan. 

En ese arte, tanto los patrones (con sus excepciones, presumo su existencia), como la clase de tropa (que presumo lo mismo) de la industria de la información, saben darle vueltas a la llave. Y como los cosechadores de aceituna, siempre tienen la lona extendida para recoger lo que caiga.

De dónde habrá sacado esta chusma que anda más preocupada por su imagen del interior del ano, una ley que ensalza la borrachera femenina; llena de chapuzas que, alguien que no serán ellas, tendrá que rehacer. Entre tanto, en el Ministerio de Transición Ecológica y en el Consejo de Seguridad Nuclear, nadie se preocupa de agilizar los permisos para poder poner en marcha, en el Hospital Juan Ramón Jiménez, en Huelva, un dispositivo, donado por la Fundación Amancio Ortega, que permite radiar con mayor precisión -ampliando las perspectivas de curación y disminuyendo los efectos secundarios- los tumores.

Como es notorio -todos hemos visto el cuadro por la tele-, ayer domingo celebraron los rojos y rojas del país, junto a los desinformados mentales de costumbre, el “Día de la Mujer”, con el cambio de eslogan “¡Sola y borracha quiero volver a mi casa!” -algunas hubo que con gusto lo continuaron usando- que, alguna persona inteligente -un infiltrado- transformó en algo parecido a “¡ni borracha ni sola, pero quiero volver a mi casa!”. A esa romería grosera y procaz, por la gilipollez del “correctamente Político”, que los imbéciles se han sacado de la manga, así les va, a los representantes de Cs, aconsejados por policías, escuchando “democráticos” rugidos, gritos, amenazas y aguantando, con la misma denominación de origen, hijoputescos empujones, se vieron obligados a marcharse, entre insultos del “¡Fuera fascistas!” y “¡floreros fuera!”. Eso se habrían ahorrado de haber seguido el ejemplo de VOX.  Como todos los años; está visto que Cs no escarmientan.

No hay nadie, a no ser una bestia parda, que no esté de acuerdo en que la mujer es un ser humano con los mismos derechos y obligaciones que el otro componente de la especie, el hombre. Cada uno con las peculiaridades propias de su sexo. No existe la posibilidad de la existencia humana con una sola parte, femenina o masculina, de la pareja. Tampoco creo yo que, a no ser una bestia parda, vea en la mujer un ser inferior que sumisamente le asista en todas sus necesidades y si así no se porta, hacerla astillas, como si fuera un objeto inservible. No hay nadie que no esté de acuerdo en que la igualdad total, lo que es necesario es que los gobiernos se empeñen en ello, y no en charlotadas gilipollescas como la de ayer, que, a partir del lunes, quedará en cuarentena hasta el próximo día 8 de marzo de 2021. 

Eloy R. Mirayo.


jueves, 5 de marzo de 2020

ES DIFÍCIL PERO SI NO LO INTENTAMOS...

La postura de los españoles es la de intentar protegerse de este sistema político y de quienes lo manipulan, con el descaro de quienes sin ningún mimbre verdaderamente intelectual que les avale y de crédito, se ven inopinadamente ante el espejo revestido por el Poder; poder que, en sus retorcidas mentes, les permite tener el rábano agarrado por las hojas, y con la "verdura" como látigo fustigador, dedicarse al hijoputesco deporte, del que tan demostrado tienen ser "figuras", de flagelar al paisanaje que temeroso no le queda más que, cubrirse con su propia debilidad, para que los golpes de todo tipo que diariamente le propina la acción política de estos chulescos indocumentados, sin la asumida posibilidad de evitarlos, les causen el menor daño posible.

La posición cobarde de protegerse sin siquiera intentar defenderse; sin amagar con un inicio de contraataque; sin erguirse preparado para intentar lanzar un solo golpe; es una cagarrutera decisión importada del sistema europeísta que, desde siempre, estuvo muy lejos del rebelde y heroico carácter hispano, al que jamás asustó el quien, su tamaño, ni el número de sus adversarios, a los que supo hacer frente y vencer, como es fácil comprobar asomándose a nuestra no lejana Historia.

La cobardía nunca debe tener derecho a la excusa; no es aceptable pasarse todo el tiempo ofreciéndole excusas al cabrón que diariamente llega para, con la peor de las malas leches y sonriente semblante, mirándote a los ojos, pisarte el pie, donde se tiene el callo.

Si durante las últimas cuatro décadas pudiera discutirse la falta de un motor aglutinador de buenas voluntades (que yo digo que los hubo: FE; FN; Juntas Españolas) hoy, existiendo VOX, surgido con mayor potencial, por el loable empeño rebelde de unos pocos valientes que sin temor al vilipendio al que iban a enfrentarse, han dicho ¡hasta aquí!. Así que al paisanaje español ya no le quedan excusas para no salir del estar morcillón en el que se ha sido arrinconado, y erguirse para ayudar a esa patriótica formación política, a ayudarnos a todos los demás para recuperar los trozos de dignidad que nos han sido robados, por unos y por otros.

Porque no hay de momento otra posibilidad, debemos estar resueltos para que con la participación de sus urnas, sumando esfuerzos, demos la vuelta, como la tortilla de patatas y huevo en la sartén, a los resultados que nos alejan de la posibilidad de recuperar la grandeza de nuestra querida España.

Todos debemos transformarnos en "evangelistas" que propaguen la idea de que se puede y se debe acabar con esta mierda de la que cada día hay más sinvergüenzas que comen hasta hartarse como cerdos, y en la que nos obligan a chapotear a todos los demás. Así, una vez todo aseado, desinfectado y desinsectado, sobre nuestro querido solar, crear un nuevo Estado, más amable y más justo, en el que todos podamos vivir a gusto. ¡Nos ha jodido! Ya sé que es muy difícil pero, si no lo intentamos...

Eloy R. Mirayo.




miércoles, 4 de marzo de 2020

SOLA Y BORRACHA...

"¡Sola y borracha quiero volver a mi casa!"

Esta pudiera ser la única idea filosófica que anide en el cerebro (no hay que ser duro y exigente!, igual es que a la señora no le cabe nada más en la cavidad craneal) de la máxima personalidad pensante del ministerio y, como la leyenda (copia de un original desechado) parece haberles tocado el mismísimo "punto G" lo han convertido en el lema, un tanto golferas (¿que podríamos esperar?), de la manifestación que desde el ministerio de Igualdad de este pintoresco, a brocha gorda, gobierno, al más típico estilo bolivariano, celebrará el próximo domingo en Madrid, con sus, también típicas y bolivarianas, zurrapas provinciales.

¡Buen ejemplo el de las recias amazonas del ministerio de Desigualdad!

Ejemplo que deseo de todo corazón que diariamente, como cambiar de braga, cumplan a rajatabla las hijas nacidas de esa ministerizada fauna; explícito modelo, en carne y hueso, de lo que es la agresiva, desenfrenada y enfermiza feminidad.

"No se equivoque, don Eloy; ellas, la mayoría de las que dirigen el cotarro, lo que quieren es ser hombres, con vagina y tetas, en vez de pene y testículos". Me ha comentado el dependiente de la cafetería donde desayuno todos los días. Eres un poco exagerado ¿no crees?. El continuó sirviendo cafés y churros.

Hace falta tener el físico muy bien surtido de gilipollez y un cerebro en dirección desconocida, para utilizar la borrachera, un vicio excluyente que termina siendo una grave enfermedad, como si fuera un valor a rescatar; digno de declarar la más dura y encarnizada lucha. 

Pero también hace falta tener un cerebro muy necio para utilizar el "sola y borracha quiero volver a mi casa". Porque ¿así de borrachas es como las quieren las responsables del ministerio de la señora Montero?


¿Así es como esa trupe de iluminatis que forman la pandilla de la Igualdad piensa que deben llegar solas las mujeres a sus casas? No puedo dejar de insistir en la creencia de que hace falta ser imbéciles de tomo y lomo, para no haber sido capaces de encontrar un reclamo mejor. Lo que no deja de extrañarme ¡siendo rojos!

¡Claro qué no! Para eso de recogerlas está el SAMUR, no para llevarlas a sus casas, sino al hospital más cercano, cuyos gastos los pagamos todos, menos la gente que, como la señora Montero, han conseguido la hazaña de cobrar un buen pellizco mensual de los Presupuestos Generales del Estado.

Lo que resulta un contraste de grandes dimensiones, viniendo de la sanjuaná de las "igualitas" -a ver si empiezan a "igualizar" por los sueldos- es la prohibición municipal del ayuntamiento de Barcelona, en el que luce la "escrachera" alcaldesa Colau, que ha tenido el  detalle, lógico de su personalidad inquisidora, de prohibir la tradicional procesión en honor a San José, que se celebra todos los años en Barcelona.

Otra cosa sería si en vez de pasear a un santo, fueran las consabidas protestantes profesionales en bolas, acompañadas de las imprescindibles batukadas.

Eloy R. Mirayo.


martes, 3 de marzo de 2020

"¡TODO ES IGUAL, NADA ES MEJOR!"

Han cambiado las formas, el fondo y las caras de los aspirantes a golfos sinvergüenzas con flecos  caprino-hijoputescos, que es en lo que suelen salir doctorados la inmensa mayoría de quienes hacen el ingreso en la Demochunga academia en la que, pasito a pasito con gran denuedo, han convertido la Política nacional.

La suerte o desgracia -según quién lo mire; una persona normal, o un gilipollas- que sufrimos todos los españoles, incluidos los menores y los militares sin graduación, es que los aspirantes salen muy preparados en esas tres materias que se dan en ese centro educativo, y en las que casi todos logran el soñado doctorado -sin necesidad de hacer un "Sánchez"-, premiado por la Democracia con un grandísimo Cum Laude (una alabanza, de tres pares de testículos, del tamaño de los cojones del caballo del general Espartero), que, muy merecida también se le otorga a "la Política", como docta Academia.

Pero hay cosas que no cambia, como dijo Carlos Gardel en el viejo tango, Cambalache: "siempre ha habido chorros (ladrones), maquiavelos, estafaos contentos y amargaos".

El problema no es el que siempre hubo... Sino como y por qué han aumentado desproporcionadamente, no por generación espontánea, sino por la oficialidad política los "chorros y maquiavelos" que, sin hacer contentos en la sociedad española, nos "estafan (lo que hacen no es por lo que se les paga) y amargan".

La sensación que las personas sencillas que asumimos ser gobernados,

creyendo que lo de gobernar debe ser labor de las personas intelectualmente más y mejor preparadas, es de sorpresa y estupor sin límites, al comprobar que Gardel, hace casi un siglo, o quizás más, hizo el retrato a todo color de nuestra actual política: "Hoy resulta que es lo mismo ser derecho que traidor, Ignorante, sabio, chorro (ladrón), generoso, estafador".

¿Hasta qué profunda sima nos llevarán, para empujarnos, esta pintoresca y medio analfabeta tribu, más parecida a la tropa de una caricatura de Pancho Villa, que a un gobierno europeo?. Y es que: "¡Todo es igual, nada es mejor; lo mismo un burro que un gran profesor! No hay aplazaos ni escalafón, los inmorales nos han igualao; si uno vive en la impostura y otro roba en su ambición. ¡Qué falta de respeto, qué atropello a la razón! ¡Cualquiera es un señor, cualquiera es un ladrón!".

Desde esos años en los que Gardel, guitarra en mano, le cantaba al mundo entero sus tangos, hasta ahora mismo, ha habido cantidad de inventos maravillosos que han venido a cambiar muchas cosas pero... Esta "democáquica" política y sus democaquitos beneficiarios, lejos de cambiar las malas actuaciones de sus precedentes, a lo que se han dado con denuedo inaudito es a blindarse en el que, "el que no llora no mama y el que no afana, es un gil".

Eloy R. Mirayo.



lunes, 2 de marzo de 2020

CONVIERTEN EN MIERDA TODO LO QUE TOCAN.

Cuando oigo que dos sinvergüenzas -por no utilizar tan pronto palabras malsonantes, aunque en estos momentos que vivimos suelen resultar muy descriptivas y atinadas- se sientan a negociar sobre algo que, de todas, todas, sabemos las personas decentes -que casi ninguno somos políticos-, que acabará afectándome en negativo física, laboral y en la maltrecha economía, de manera individual y también colectiva; nos gustaría enterarnos, al menos a mí, para estar preparado con apósitos y ungüentos paliativos, que es lo que estarán pidiendo los hijoputas de los "dantes" (los terroristas y separatistas que bien conocemos todos), y que es lo que les irá a entregar (en este caso en singular) el cabrón del "tomante" (ese que igual conocemos todos). 

También, por puro morbo, creo que a todos nos gustaría saber cuál es la postura en la que cada cual se coloca en tan frecuentes encuentros, en busca de más comodidad y mayor satisfacción. Y, también por satisfacer nuestro incorregible morbo, no nos vendría mal que alguien tuviera la decencia de explicarnos qué es de verdad lo que están tramando; como, cuando y cuánto nos va a afectar a los españoles decentes, que casi ninguno somos políticos, lo que se disponen hacer con el resultado alcanzado, cada uno de ellos, después del "coito", además de fumarse el clásico cigarrillo.

¡Qué puta mala suerte nos ha alcanzado a los españoles!

Vamos saliendo de uno malo, caemos en otro peor y recaemos en otro 

al que difícilmente se le pudiera contar la exagerada colección de negativos adjetivos descalificativos que con sus actuaciones públicas, junto a sus constantes mentiras y chalaneos políticos, ha ido mostrando, todo ello con el único fin de, primero alcanzar y después resistir en una posición de tan alto valor, como es regir los destinos de una nación, para la que Dios no le ha llamado, poniendo en su oquedad craneal la cantidad de materia gris necesaria para poder realizar las transcendentes grandes obras.

Hay, para el bien de la humanidad, personas que pareciera que van como sobre pétalos de flores caminando por la vida, creando belleza y bienestar para uso y disfrute de todos los demás, con el extraordinario acierto que les da un cerebro superior, mientras otros solo saben caminar pisando su propia mierda; tratando de convertir en mierda todo lo que tocan. Y tocan mucho.

Ese es el camino, el de la mierda, en el que estos repelentes políticos están obligando a caminar a España y a los españoles decentes, que casi ninguno somos políticos, y la mierda ya nos va llegando a las corvas.

Eloy R. Mirayo.