No se puede estar a expensas de que ocurra el milagro como solución del problema, sino trabajar con dedicación, denuedo e inteligencia, porque sabido es que todo problema lleva implícita la solución.
Claro que para esa labor, viniéndonos al problema en el que estamos hundidos hasta el cuello España y con ella los españoles; escuchando las soluciones que proponen la mayoría de los postulados... ¿qué se puede esperar? ¡Un auténtico milagro de Dios padre, llegado desde el Cielo por un bello y puro cuarteto de Ángeles, comandado por un Arcángel!
Ah; pero había que pedirles que no lo dejaran y se fueran con la celeridad con la que habrían llegado pues, conociendo
el percal; sería imprescindible como medida para que el milagro surtiera efecto, una explicación de exquisita claridad de la "a emplear (sería necesarias muchas equis (X) repeticiones), ya que como todos sabemos, y con ello cargamos, en la Carrera de san Jerónimo hay mucho licenciado en burrología.
Pero, como eso que "propongo" como ungüento para nuestras "heridas" es una entelequia que, habiendo tanta miseria que vencer en el Mundo, no sería digno de Dios que por su hacer, en un celestial plis plas, recuperásemos aquellos días felices. Así que la solución deberíamos empezar por "adecuar" la colocación del mobiliario de nuestra entrepierna para, en el tono que sea preciso, exigir más rigor en el gasto de las administraciones; mejor preparación en nuestros políticos (no vale presentar títulos universitarios falsos, ni "Cumes Laudes" adulterados por pertenencia política) y moderación en sus sueldos, tan desproporcionadamente irrespetuosos con la media de sueldos que se perciben hoy en este país, las personas decentes trabajando, no en la mejores condiciones posibles,
estando obligados con sus ingresos vía impuestos, a colaborar en el total del gasto del Estado.
No es fácil la empresa pero, por el rastro que va dejando: choriceo institucional; inseguridad ciudadana; irredento Paro; espectacular movimiento mafioso-criminal; enaltecimiento del terrorismo, incluyendo en el juego político a movimientos políticos como BILDU, que homenajean a asesinos, exponiendo sus obras en un local de la administración, en la ciudad de Galdácano; etc.,
algún día las personas que sufrimos las consecuencias de tanta podredumbre y malicia, no tendremos más remedio, para acabar con tantos males, que alzarnos, con herramientas o sin ellas, contra este deleznable sistema, y contra sus beneficiarios, que parece estar ideado y llevado a efecto por delincuentes para su beneficio, y para acabar con la decencia.
Resulta que el concejal del Ayuntamiento de Madrid, el señor Pablo Soto, ha sido dimitido acusado por abusos sexuales; lo que ha promovido que la señora que en la capilla de la Complutense dijera a quienes estaban dentro que "arderéis como en el treinta y seis", ha dejado claro que "no es no, caiga quien caiga". Poco bombo y platillo comparado con lo que hubiera sido si el concejal fuera del PP ¡y no digamos si hubiera sido de VOX!.
Lo más gracioso es que el tío no lo recuerda porque "eso pasó estando bajo los efectos del alcohol".
Eloy R. Mirayo.
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