jueves, 19 de agosto de 2021

UN HECHO INEXPLICABLE.

No se puede inteligentemente tratar de llegar a encontrar explicación a la pasota actitud del Presidente del Gobierno de España, respecto a lo que está sucediendo en Afganistán, y a las consecuencias que de retruque nos pudieran afectar en un futuro próximo, disfrutando en su lugar de veraneo, en la encantadora isla canaria de Lanzarote, mientras fraulein  Markel, monsieur Macron, Mister Boris Johnson, por ejemplo, se incorporaron a sus respectivos puestos de responsabilidad, interesándose en primera persona de como se iban realizando la repatriación de sus nacionales. Y ahora, el veraneante en "primera categoría", de gañote total, a cargo del bolsillo del contribuyente, una semana después de lo que obliga la decencia política del alto cargo que representa,  nos amenaza a todos los españoles con volver mañana viernes, cuando "su labor", la tienen dominada quienes saben hacerlo.

No se puede inteligentemente tratar de encontrar  explicación a la actitud del Presidente del gobierno de España porque, en España, todos los españoles; en Europa, todos los europeos; en EEUU, todos los Yankees; y en el resto del Mundo, todos sus habitantes, tenemos y tienen perfectamente sabido que Pedro Sánchez es un extraño producto del "reino animal",  ininteligible, torticero, trolero y absolutamente inexplicable en su natural manera de pensar, de hablar y de proceder.

¿Qué explicación puede justificar, me decía mi abuela Leonor,  la presencia de un "mojón", de agarrate y no te menees, como adorno en el mismísimo centro de una riquísima ensaimada mayorquina, rellena de apetitosa crema o de abundante "cabello de Ángel?. Pues... eso.

Es cierto que cuando alguien se esfuerza tenaz (como diariamente comprobamos en los medios de información-deformada próximos y afines al "Régimen Sanchicta" servilmente encorvados por el peso del euro)  en la búsqueda por hallar los grandes beneficios de algo inexistente (lo que debería ser un buen gobernante en un buen  Gobierno) y al final, sudorosos, descamisados y despeinados, casi siempre -dejemos espacio a la probabilidad-  encuentra o fabrica de cosecha propia, un "algo" que, aunque deforme y maloliente, lo presenta orgullosos, como si fueran el mismísimo Doctor Alexander Fleming mostrando una dosis de su Penicilina, intentando -tarea imposible en este caso- desvergonzadamente convencernos del éxito de su intento, apercibiéndonos de lo agradecidos que los españoles debemos mostrarnos por ello.

Eso es lo que algunas personas, gente estudiosa y de buenos instintos, que clavados los codos en la superficie de madera de sus pupitres, llevan mas de tres años detrás de ello, tratando de desguazar pieza por pieza el puzzle de toda su inexplicable personalidad, para ver si se encuentra en tan infinita vaciedad, sentido beneficioso que justifique de alguna manera el nacimiento de semejante espécimen humano.

Al mismo tiempo, intentando no perder comba en "el duble", intentar llegar a alcanzar el descubrimiento del por qué y el para qué de la inexplicable metamorfosis experimentada en su persona, física y psíquica, pasar de la nada, hasta llegar, en su innato narcisismo candonguero y hip hopniano, a consumar el  irrefrenable y caprichoso deseo -inexplicable, una vez evaluada su capacidad intelectual- de presidir el Gobierno de España. Lo que no deja de ser un hecho inexplicable, para todo quisqui, por haberlo conseguido juntando para ello a una turbia tribu de mamones y mamonas de diferentes malas leches de diferentes pezones, de diferentes ubres.

La insolvencia del ciudadano Sánchez; su dependencia, fruto de su ignorancia, de lo que le soplen sus cientos de asesores, lo vuelve a quedar fuera de toda duda por el irrefutable hecho de que su promesa -con olor al defenestrado Iván Redondo- a bombo y platillos de tener al 70% de los españoles con la pauta de vacunados completa a mediados de agosto, como otras muchas cosas, no se ha cumplido. Y él, que de nada sabe ¡como iba a saberlo!.

Eloy R. Mirayo.

 

 

 

viernes, 13 de agosto de 2021

ECONOMÍA SUMERGIDA.

 ... Y de pronto, porque en verano, con todo el golferío político en vacaciones que les pagamos entre todos, ocurren pocas cosas reseñables -desde hace varios años, ni siquiera se adorna con la legendaria aparición del monstruo del Lago Ness- con la identidad suficiente como para que pueda mantener por algún tiempo entretenida la mente del paciente rebaño del Señor... Sánchez, aparte del escabroso asunto -otra de las peculiaridades del Sistema- del ventrílocuo José Luis Moreno,



"Morenin", para su cuervo Rockefeller, aparece en nuestros "bien alimentados y bien engrasados" medios de información, la tan traída y llevada "Economía Sumergida", como el más dañino de los cánceres que amenaza seriamente con acabar con la economía oficial, como si la "draculiana" política impositiva actual, a la que se ha llegado laboriosamente por la acción de la Izquierda (PSOE) y la Derecha (PP) durante los últimos cuarenta y cinco años, se dedicara a repartir caramelitos de violeta. O sea,  "Violetinas". 


Una de las ricas golosinas que se pueden comprar en "la Pajarita", centenario establecimiento sito en el mismísimo centro de Madrid: la Puerta del Sol, gracias a que aún no ha entrado en los planes de Carrefour ni en los planes de las demás "Grandes superficies", tan bien tratadas por la señora Esperanza Aguirre.

Es falso de toda falsedad que ese flujo económico, único flotador salvador para una infinidad de españoles, amenace mínimamente la economía real del país, más que los políticos que continuamente nos vienen. 

Lo verdaderamente preocupante para la Economía de España, son los 3.543.900 parados; los 12 millones de españoles en riesgo de pobreza; el oscuro futuro laboral de los jóvenes, y 25% de españoles que viven en situación de exclusión social.

Lo cierto es que la economía sumergida, separando los trucos y enjuagues que utilizan algunas "damas cabronas" y algunos "caballeros cabrones" que dirigen grandes empresas comerciales o industriales e importantes bancos -que tan suave les han tratado los distintos gobiernos ávidos, cuando su chulería les condujo a que fueran pillados por Hacienda-, lo que hace, que sería obligación del Gobierno, es salvar del cierre a muchos de los pequeños negocios que de manera heroica aún resisten -algunos por poco tiempo- dando salarios que posibilitan mantenerse a muchas personas fuera del alcance del Instituto de Estadística de España; fuera del desgraciado 25% que dicho instituto tiene registrado.

El ágil dinero que por tortuosos vericuetos y peligrosas trochas, lindantes con profundos despeñaderos, camina lejos del alcance de las insaciables fauces de Hacienda, y su camino siempre acaba saliendo a la superficie, cayendo en las manos de Repsol, Cepsa, Mercadona, Inditex, Corte Ingles, Telefónica. Y, si analizamos los números, tampoco puede creerse  que hayan sido capaces ¡con su imperdonable pecado monetario! de haber "empobrecido", un terrorífico 12% el patrimonio de  personas como Amancio Ortega: en 2020, en lógica progresión: 57.000 millones de euros. Sandra Ortega. En 2020: 5.600 millones de euros.  Rafael del Pino: en 2020: 3.200 millones de euros. Miguel Fluxá: en 2020: 1.500 millones de euros. Juan Roig: en 2020: 4.100 millones de euros. (Datos recogidos de Forbes).

De lo que no debe caber la menor duda a nadie es que la existencia de una economía huida de la economía oficial, capaz de mover 270.000 millones de euros -el último año- es responsabilidad de este gobierno, y de los anteriores gobiernos habidos en España, de este sistema dictatorial, egoísta y excluyente, del que un parte muy importante de españoles, para poder sobrevivir sin ningún tipo de lujos (patatas, judías, garbanzos lentejas...), y sin cubrir todas sus necesidades, se han visto obligados a defenderse de su desmedida, y por sus logros sociales, injustificada ferocidad. 

Eloy R. Mirayo.