Lo malo de la situación política en la que se ven metidos los ciudadanos de este país, es que hay gente, cuya opinión propia encuentra eco en los medios de comunicación, que les parece lógico el "no" del "señorito Pepis" (Pedro Sánchez) a la formación del Gobierno por parte de quien sacó más escaños en la "última charlotada electoral".
"Sánchez defenderá el "no" porque el PSOE no puede "indultar" la corrupción de Rajoy" (la señora Lucía Méndez, en el diario El Mundo).
Por lo leído en el periódico parece ser que la señora Méndez, adelantándose a conclusiones judiciales, da por hecho que el señor don Mariano Rajoy es un corrupto (sería bueno que alguien obligara a esa escribiente a rectificar su afirmación o, de lo contrario, a que aporte pruebas de la corrupción que asegura en su artículo) de tomo y lomo y, por ello, encuentra normal y lógico que el señor Sánchez no sea capaz, ni tapándose la nariz,
de indultar la supuesta corrupción del líder del PP. Lo curioso es que nada dice de la "convivencia pacífica" del apolíneo líder socialista con la corrupción "socio-ugetista" en Andalucía.
Alguien, que ahora no recuerdo, decía que la mayoría de los periodistas de este país son "Rojos"; de eso no cabe la menor duda razonada. A la aseveración de ese rojerío rampante, habría que haber añadido el numeroso grupo de los que les muerde la yugular la envidia; los que les guía el odio personal, simplemente porque si, por ser el presidente del Gobierno Español (ahora en funciones) y que, usándole como el monigote de la caseta de una verbena, se pasan el día entero (día tras día) faltándole al respeto, que es otra de las muchas maneras que el "cabronerío nacional" pone en uso para faltar al respeto al resto de las personas que componen el paisanaje de este país, en el que sigo exiliado.
Algunos, sinvergüenzas, defecándose sin el menor decoro, en la verdad y en la decencia (de lo que son verdaderos maestros unos mequetrefes que se dicen humoristas cuando solo son unos pésimos payasos,
que vierten su insolente veneno desde las ondas que emite la emisora que da cobertura y SERvicio al esperpéntico rojerío nacional.
El señor Mariano Rajoy (una de las muchas equivocaciones del señor José María Aznar) nunca ha sido y nunca será, aunque consiga volver al la Presidencia del Gobierno, mi Presidente. Mi amigo Braulio, tan exagerado como siempre dice que "alguien así en nuestra España, no valdría ni para presidente de una comunidad de vecinos". Yo sinceramente pongo un poco en duda la afirmación de mi amigo Braulio, de que el señor Rajoy no pudiera valer para presidir una comunidad de vecinos. Quizás no del barrio de Salamanca de Madrid pero, tal vez del barrio de San Blas. A parte de eso ¿qué queréis que os diga? Si yo fuera un ciudadano de este país, o se me diera la posibilidad de votar, jamás le daría el voto. Ni a él, ni a ninguna de las demás perlitas que se ofrecen a sacarnos del pozo en el nos han metido.
Eloy R. Mirayo.