Llevadas a cabo en todo el territorio nacional las elecciones en sus ya clásicas versiones -Generales, Autonómicas y Municipales y la escurriduras de las europeas-, corazón, sangre, pulmones y oxígeno de esta Democaca, se abre el "Rastrillo de la Política".
La desvergonzada práctica prostituta del "compro, cambio y vendo". Mar de pestilentes aguas revueltas donde mejor se mueven los más avezados trileros de nuestra política, en general. Gentes capaces de crear gobiernos, de cuatro inservibles astillas viejas y carcomidas.
Cuantos y cuantas (el centro derechita cobarde, el centro centro variable según sople el viento, el sin escrúpulos centro izquierda y también ¿porque no? el chungo rojerio sin más centro político que el de conseguir a toda costa el poder continuar sacando
la "tela" necesaria para seguir, el mayor tiempo posible, pagando a la extraña banca, la hipoteca de la "dacha"; no vaya a ser que nos caiga el correspondiente desahucio sobre la chepa, ahora que tampoco estará la Colau, andan con los pantalones por los suelos y los calzoncillos, tangas y bragas bajados hasta las corvas, mostrando sus "encantos" y su amplia disponibilidad para llegar a cualquier tipo de changa, y en sus múltiples posturas.
Y es que lo cierto es que esta política que se nos está administrando sin compasión a nuestra incapacidad de respuesta -al menos hasta ahora-, lejos de cualquier valor noble y puro, es un negocio oscuro del que se lucran de manera personal y de grupo los individuos menos preparados intelectualmente de la sociedad, pero los más audaces y ladinos. Admitiendo las excepciones que, como en todo y en esta vida, nadie puede discutir su rara presencia.
Lo veremos, y nadie podrá decirme a la cara que soy muy exagerado cuando dibujo este momento político como un despreciable mercadillo.
Veremos a partidos en extraños pactos que servirán para que otros partidos, reconocidos durante la campaña en las antípodas políticas
("ELECCIONES: Ángel Gabilondo no se resigna y hablara con todos los partidos para intentar negociar su investidura" -diario El Mundo-.
"Pactos: Cs pone condiciones muy duras a los candidatos del PSOE para pactar con ellos" -diario El Mundo-.
Elecciones: "Cs deja abiertas todas las posibilidades de acuerdos en Castilla-León" -yo sigo en mis trece: Cs se pone duro, pero no tira el camastro)
puedan mantenerse en el disfrute del poder que tenían o, apoyados en la joroba, conseguir alcanzarlo. De una u otra forma, aseguro a quienes lo duden, que nos saldrá caro al resto de los españoles.
Muchos de los que están, ante la perspectiva de tener que separarse de la vaca, con "nuestra chequera en la mano" están dispuestos a pagar lo que se les pida, mientras los aspirantes, también con "nuestra chequera en la mano", pagaran lo que se les pida por acampar junto a la vaca y así poder llegar a acariciarle sus suculentas ubres.
Eloy R. Mirayo.
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