EL QUE TIENE HAMBRE CON PAN SUEÑA.

Así es como están dejando a España, las hordas democaquitas. Ya lo predijo el socialista Alfonso Guerra: "a España no la va a conocer ni la madre que la parió", cuando junto a Felipe González pusieron la primera piedra de la ruina en la que nos encontramos. Eso lo deberíamos recordar todos los que lo vivimos entonces; y explicárselo a los que nacieron después.

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Es falso el que se pierda la Dignidad. Lo que ocurre es que de quién por su dudoso comportamiento se dice que ha perdido la Dignidad, lo real es que jamás ha poseído semejante don.

Estamos, los españoles en directo y el resto del mundo enterados en diferido, por los distintos medios de comunicación, 

asistiendo a dos sucesos que si se pone atención en las declaraciones de los individuos que están involucrados, nadie podrá poner pegas a mi afirmación.

Por un lado, la falta de Dignidad de quienes tratan a toda costa prolongar su estancia en la gobernación del país, admitiendo igualdad de trato, como si se tratara de dos países soberanos, las imposiciones y propuestas de quienes deberían estar sancionados por atacar al Estado, desde una de sus propias instituciones.

Esto ocurre porque, desgraciadamente para España, no existe, fuera de su presencia estética un Estado pleno de autoridad ¿existe un Jefe del Estado? Es muy posible que don Felipe VI (para él todo mi respeto), 

tenga capacidad para cubrir con éxito tan importante cargo, con gracia de otorgar la concesión de gobernar, a ¿partidos políticos...? ¡Bueno está!, que presentarían a personas para ser elegidas por sufragio, para ese importante trabajo que es la gobernación de un país. Pero ya se ocuparon los políticos, ávidos de poder, de que, por sus múltiples innobles intereses, así resultase.

Estoy convencido de que si se nos pidieran reconocer a cinco políticos de entre los que ha parido esta Democaca a los que se les reconociera Dignidad... No seríamos capaces de cumplir la propuesta.

Desgraciadamente para España, es que prácticamente todos los que se le acercan es para ver que sacan de esa cercanía.

La misma falta de Dignidad se encuentra en los delincuentes que se está juzgando que, usando la política oficial, atentaron contra el Estado Español, en su integridad territorial, proclamando la disgregadora República de Cataluña.

Hace falta ser indignos, todos ellos -los encarcelados y los que deberían estarlo- para mantener una actuación tan enfrentada con el Estado, sin renunciar a sus sueldos como funcionarios de ese Estado. Los que están encadenados al presidencial sillón, como estos hijos de puta que nos quieren robar a Cataluña, no es que hayan perdido la Dignidad, sino que jamás la han tenido.

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El que tiene hambre con pan sueña.

Delgado bautiza a PP, Ciudadanos y Vox como la "derecha trifálica": "Hay mucha testosterona".

Hay cosas que identifican a la sociedad moderna (Democaca) el echar mano al dinero, y el tener preparado el cuerpo para el folleteo, y tente tieso.

Da lo mismo a esta alturas, en eso existe total paridad. Tanto ellas como ellos llevan el bolso o el cartapacio abierto, como las fauces de un tiburón blanco, tratando de engullir todo euro que se mueva, o simplemente se tambalee.

Lo mismo ocurre con el tema sexual; ellos y ellas son rápidos, como los pistoleros del lejano Oeste, para tirar de sus tapa culos, y ponerse, en cualquier sitio, como perros salidos, sin esperar a la comodidad de un Pikolin.

Eso tiene un reflejo, como digo en el comportamiento, pero también en el discurso normal. Entonces ocurre, quizás porque se "tenga hambre", que en un tema tan serio como debería ser -y no es- la política, se utilicen un discurso filosexual, siendo tan rico como es nuestro querido y muy agredido idioma.

Eloy R. Mirayo.