MONSTRUOSIDADES.

Estas monstruosidades de plástico que, a la vista está, "cantan que dan pena" por delante del verde y fresco follaje arbóreo del fondo, es una de las dos cosas que más exige actitud disciplinada al personal gobernado: los madrileños, ante la autoridad competente, municipal y estatal -digo de los madrileños porque esas cosas antiestéticas las tengo a la puerta de mi casa, aquí en Madrid- si no quieren verse en dificultades administrativas, además de ser estigmatizados como ateos por los apóstoles de la religión más respetada y venerada (ni la Cristiana, ni los testigos de Jehová) por la "progresía más militante": El Medio Ambiente; y esos continentes tan poco salerosos, son sus más respetados altares. 

Lo otro, para lo que los españoles debemos ser de lo más disciplinados, es nuestro trato con el ministerio de Hacienda; la del slogan "Hacienda somos todos". Una afirmación de lo más embustero; cosas de políticos; da lo mismo lo que se vea denunciado -componendas con banqueros- en los medios de comunicación; lo normal del sistema es la exageración de lo poco bueno, y ocultación de lo mucho malo. Malo jugar con Hacienda: ahí está Cristiano Ronaldo, disciplinado y tan contento por haber contribuido a la Hacienda española con 18 millones de euros.

En la fotografía de los contenedores de plástico vemos tres modelos diferentes, uno es repetido, que cada noche, rompiendo el silencio general, se oye la atronadora música que interpreta el empleado -uno solo; con los anteriores cubos iban dos o tres- zarandeando contra la caja del camión recoge basuras.

Recuerdo que empezamos por uno pero, a los listillos que se aprovechan, muy bien aprovechados, de la transformación de lo que allí se recoge, les viene mejor que pagar sueldos a trabajadores que lo hicieran en sus almacenes, lo hagamos nosotros en nuestras, que sale barato. 

Es posible que muchos madrileños, viendo ante el portal de sus casa esas barbaridades estéticas, piensen que es demasiado; que no puede haber más. Craso error, queridas y queridos paisanejos míos. Es muy posible que este precioso modelo, con tabla, tapa y escobilla, de más cuidada estética como vemos en el fino, elegante y acogedor modelo, 

sea el próximo contenedor que el ex excelentísimo gobernado por la alcaldesa Carmena,

recoge papeles puestos adrede en la calle (demagogia electoralista para imbeciles), ponga junto a los otros tres, después de haber salido a la luz pública:

la novia está ahí, como la desnuda "Maja de Goya", ya solo faltan los pretendientes al tálamo: los avispados especuladores y los políticos corruptos para poner en marcha el próspero negocio salido del culo de los contribuyentes que les hará más ricos, consiguiendo colarse entre esos que son los más ricos del Mundo. ¿Dónde saldrán a la superficie los dineros del narcotráfico? ¡Qui le sait!

El negocio para Roca y sus competidores puede ser de incalculables beneficios. Quizás aquel que sea capaz de acoplar un watercillo como el quinto asiento de los coches, conseguirá ser coronado como el rey del Waterclos. Y los que no tengamos coche, si no es que ponen obligatorio defecar en los wateres instalados en plena calle por el ayuntamiento, podremos sacarnos unas buenas perras haciendo hucha semanal y vender lo ahorrado el viernes, para pasar un buen fin de semana.

Adiós a los humos de los gasóleos; adiós a la tiranía de los jeques árabes; adiós a la boina celeste que está instalada sobre la ciudad de Madrid.

Yo, ya me he comprado un sombrero y unas buenas gafas de sol.

Eloy R. Mirayo.