martes, 22 de mayo de 2018

¿QUÉ ES LO QUE PIENSAN LAS PERSONAS QUE HAN DADO SU VOTO.?

Lo que más siento es que debido a las circunstancias, mis visitas se me quedan demasiado cortas; en veinticuatro horas no da tiempo a casi . Tengo los ojos cerrados en Albacete y cuando los abro, estoy bajo las casas colgadas de Cuenca.

Es lo que me viene ocurriendo a lo largo del emprendido periplo por mi -perdón- por nuestra extraordinaria Patria. Es como yo lo estoy haciendo, la mejor manera de conocerla a fondo, lo que hace amarla cuanto se merece y así, poderla valorar en su infinito valor.

Cuenca es una belleza en "las alturas y también en el llano, aunque sea su parte "moderna".

Siempre que voy a Cuenca dejo el vehículo en la parte baja, en un restaurante que está cerca del río, y subo andando la Cuesta hasta la mismísima puerta de la santísima Catedral.

Sabido es que esta ciudad es más que las casas que cuelgan en el precipicio y que la Catedral ¡arreglados íbamos a estar!. La moderna Catedral, los museos de Arte Abstracto, el Paleontológico, el de Ciencias, el de la ciudad y, sería un sacrilegio no pasar por el puente de San Pablo y desde él, dar libertad de acción a los ojos propios.

Es incalculable el número las cosas importantes que Cuenca generosamente se dedica a enseñar a quienes estén interesados en sumar más cultura a la que ya se tenga acumulada. Quienes tengan la suerte de tener esa cosa tan rara ¡cultura! Greggg.

Nunca se debe uno olvidar la comida. Y aquí, en Cuenca, como en el resto de España se come cojonudamente ¡os lo digo yo!.

Un Mortereuelo que es, una especie de paté grueso, hecho con carne de caza que se come untado en el pan. Un Ajo Arriero que es un puré de patata, bacalao, ajo, huevo duro y, como se ve en la foto, adornado con una riquísimas nueces.

Una de las delicatesen de esta tierra son los Zarajos, que son las tripas de cordero lechal, limpias y liadas en sarmientos como ovillos (los mejores se comen en el "Mesón el Bodegón). Y de postre Alajú, un rico postre de origen árabe.

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La política nacional es como ese manantial que en lo más alto de un cerro jamás deja de brotar agua, por pertinaz que sea la sequía.  

Así en la política nacional brotan los escandalosos casos delictivos. Si la política democaquita fuera un edificio de quince plantas, esas quince plantas estarían infectadas por prácticas delictivas asociadas al dinero, y a todo lo que  pudiera crearlo de manera indirecta -mordidas suculentas-.

Lo que ellos, los políticos desvergonzadamente golfos, parecen empeñados, es en enseñarnos que en esa "profesión" como en el edificio de quince plantas, la podredumbre flota e impregna en las -no sé si quince plantas- distintas capas en las que se pudiera dividir la escala de la actividad política.

Es raro el día que las gotas no nos salpican a las personas decentes de este país. Nombres altisonantes; presidentes de autonomías; ex ministros que fueron muy sonados; senadores; diputados; alcaldes y concejales (a todo eso hay que súmales las "aes" del feminismo).

Hoy nos sobresaltan los medios de información, anunciándonos el arresto por la Guardia Civil, del exministro y expresidente de la autonomía valenciana, don Eduardo Zaplana y un largo etc, entre los que se encuentra el presidente del Estudiantes, equipo de baloncesto madrileño.

Y yo me pregunto: ¿qué es lo que ante semejantes ejemplos, piensan las personas que han dado su voto?. Están todo los juzgados de España atestados de casos en los que están imputados políticos y, aún así, no han salido, ni saldrán, muchos más casos de los que ya han visto la luz y están en manos de la justicia.

Será sin duda por mis escasos conocimientos, siendo un simple oficial artesano, no llego a entender cómo es posible que, tanto "mago" que han hecho desaparecer montones de millones de euros, estén disfrutando en plena libertad, de todo aquello que han adquirido con el producto "desaparecido".

Eloy R. Mirayo.


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