Esto, es una manifestación, de personas que creen que España es "una unidad de destino en lo universal" y, que llegado el momento sabremos responder adecuadamente, a pesar de los políticos de turno.
Esta fotografía le muestra a Arturo Mas, y demás apátridas que le siguen, la determinación de la gran mayoría de los españoles de todas las regiones, de continuar luchando en unidad, por conseguir alcanzar la meta de acabar con la crisis que ha montado con su sueño de grandeza; sueño de grandeza de un ser ética y moralmente pequeño, que se atreve a gallear porque quien debería exigirle la debida lealtad al Estado a quien representa en Cataluña, no se sabe por que motivo (quizás algún día lleguemos a enterarnos), no toma las medidas que la ley pone a su servicio, en defensa de la legalidad vigente.
Esa del encabezamiento, es la magnífica fotografía de la manifestación del día 28 de noviembre, en respetuoso recuerdo de Francisco Franco y José Antonio (no trato de engañar a nadie haciéndola pasar por actual); está recuperada de la portada del desaparecido "El Alcázar" del día 29 de Noviembre de 1983.
¿Esa enorme cantidad de personas fueron capaces de llenar el paseo de la Castellana de Madrid, desde la plaza de Colón, hasta la estatua ecuestre del Caudillo que estaba ubicada ante la puerta de los Nuevos Ministerios (plaza de san Juan de la Cruz) solo por recordar a esos dos ilustrísimos fallecidos?
Se equivocaron quienes así lo creyeron entonces, y quienes lo piensen en estos momentos. La gran mayoría de los españoles, de todo el territorio nacional, sin excepciones, siempre nos unimos cuando algo o alguien se interpone en nuestra unidad. Ninguno de los nacidos sobre esta formidable piel de toro, salvo los imbéciles que confirman la regla, reniega de su españolidad, porque muy necio hay que ser para renunciar a una patria tan importante en el concierto mundial. "Ser español es una de las pocas cosas importantes que se puede ser en la vida". (Me imagino que los bien nacidos en otros países piensen del mismo modo pero, ser español...).
Los españoles olemos el peligro de ruptura nacional que se pretende desde Cataluña y las Vascongadas, y ya se nos han erizado los pelos y tiesas las orejas, como los lobos ante el ataque de un predador.
Mucho cuidado, por que ahora solo nos hace falta el que encabece la "Cruzada" contra "capullos garrulosos" que no merecen más patria que el excusado de un tabernucho guarrindongo, y como la poltrona para el jefe, su bien "decorada" taza del water.
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