¿Es necesario algún comentario? No; por muy buena voluntad que pusiera, pues de ciencia ando escasito, no podría ser tan explícito como lo son estas dos hojas del diario El Mundo. Y lo único que se me ocurre, con mi escasa originalidad es, por no quedar en la evidencia de haber perdido la capacidad de expresarme, decir que no me satisface en absoluto, porque el dinero que se roban también es mi dinero, el hecho de que estas tropelías tan continuadas, vayan llenando las "salas" del Museo que con tanta ilusión he montado.
Cuando el agua rebosa el vaso, se impone cambiar el recipiente.
Es verdaderamente extraño que cuarenta millones de españoles no seamos capaces de poner freno a lo que unos cuantos sinvergüenzas hacen con nosotros; con nuestras vidas y haciendas; con nuestra dignidad y contra nuestros derechos naturales. Y la culpa la tiene Franco.
Si, si; don Francisco Franco tiene la culpa, porque nos hizo creer con su forma de gobernar, que el Gobierno es un ente benefactor cuya mayor preocupación es la constante búsqueda de la mejora de las condiciones de vida de los españoles (entre los que yo me encuentro), tratando de crear Industria fuerte y competitiva, que asegurase los puestos de trabajo y su suficiente rentabilidad. Y también es culpable de haber dejado en la presidencia del Estado a una persona que, lejos de querer ser un buen jefe de Estado, con mando y responsabilidad, prefirió vivir lo más cómodamente (renuncia a los senadores por designación real), y sin tener que soportar los sobresaltos que pudieran sobrevenirle de ese Estado, que tan generosamente le fue entregado, sin siquiera quererse enterar de en que manos lo dejaba.
En el acto de la Jura de la Bandera, que con gran emoción y respeto participé, se nos dijo que en caso de no respetar nuestro juramento Dios, nos lo demandaría. Espero que esa demanda caiga sobre las cabezas de todos cuantos, sin importarles la trascendencia moral y ética del perjurio, se pasaron el juramento por el lugar en el que los hombres tenemos la "hombría".
También culpo a nuestro Caudillo de creer en el buen intencionado dicho andaluz que dice "¡to er mundo e güeno!", y despreciar el constatado hecho de que las monarquías, en el lugar que más y mejor lucen, es en el teatro, siendo parte del libreto de una opereta vienesa.
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¡Qué lastima! Otro año que nos quedamos los buenos aficionados al fútbol, sin equipo "astur" en la primera división. Sporting- Oviedo u Oviedo-Sporting ¿Que vamos a hacer con vosotros?
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