lunes, 10 de octubre de 2011

A perpetuidad.

El Partido Popular, parece ser que quiere incluir en su programa electoral, junto a otras propuesta innovadoras, la pena de Cadena Perpetua –a perpetuidad- Revisable, para según qué delitos. Me parece bien, ya que la Pena de Muerte no parece que piensen rescatar. La mayoría de los españoles tenemos la sensación de que la justicia para grandes crímenes –terrorismo, crímenes en serie y narcotráfico a gran escala- es demasiado laxa; con asombro, en muchas ocasiones –demasiadas se podría decir- vemos a asesinos de la ETA, asesinos en serie, como el que en Murcia, con una catana, mató a su familia y “padrinos” de la mafia gallega, salen de las cárceles sin haber purgado la totalidad de su condena, y algunas veces, ni la mitad. Los órganos de la “justicia” vendida al PSOE, escitan nuestra desconfianza y desazón, cuando nos enteramos que puso en libertad al sanguinario Ternera, responsable de la muerte de 12 guardias civiles, en un atentado en la plaza de la República Argentina de Madrid, de Juana Chaos –participó en 25 asesinatos-, puesto en libertad para que se repusiera de una huelga de hambre, a base de jamón y polvete, y al asesino Usabiaga, para que pudiera cuidar de su madre, habiendo una hermana que podía hacerlo en mejores condiciones; lo que hace mientras se hermano asesino pasea su palmito.

Me juego el bigote, y no lo pierdo si lo apuesto, a que a la mayoría de los españoles esa propuesta del PP, les suena a música celestial. He escuchado alguna que otra vez: “Odia el delito, y compadécete del delincuente” ¡y una mierda! El delincuente, y más los que he enumerado, no los “choricetes pelaos”, han de cumplir ¡HASTA EL ÚLTIMO SEGUNDO DE SU CONDENA! Y, para que se decidiera la autoridad competente  a revisar una Condena Perpetua –a perpetuidad-, deberían darse las condiciones, mil veces probadas, de arrepentimiento sincero; pero jamás, antes de purgar los treinta años que suponen la condena máxima actual, esa que nadie cumple.

Las personas decentes, los que de forma directa o indirecta sufrimos la delincuencia y el terrorismo,  nos parece un avance, necesario y de progreso “fetén”, no el progreso guarro, maloliente y casposo de los “progres” a los sinvergüenzas que están a punto de ser corridos, como a las reses de cuatro orejas, por las calles de Pamplona.

A, todos nos parece bien, pero al ministro de Justicia, no; él se apresuró a salir al paso, tachando al PP de retrogrado, pues asegura que la legislación vigente, tiene las penas suficientes y no son las menos duras de Europa. ¿El PP, retrogrado? Y lo dice un individuo que parece recién un fósil -bien gordo- rescatado del yacimiento de Atapuerca o, más bien, el “eslabón perdido prehumano”, que parece ser lo que nos emparenta con los grandes monos.

“Me cachis sean la, en mirándolo, es talmente”. Es que soy de pueblo ¿se me nota? No lo puedo remediar.

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