... Pero nosotros tenemos la razón.

¡¡¡ARRIBA ESPAÑA!!!

EN EL DÍA DE HOY, CAUTIVO Y DESARMADO EL EJERCITO ROJO, HAN ALCANZADO LAS TROPAS NACIONALES SUS ÚLTIMOS OBJETIVOS MILITARES. LA GUERRA HA TERMINADO.

Francisco Franco Bahamonde, Generalísimo de los Ejércitos de España.

BURGOS 1 DE ABRIL DE 1939 -AÑO DE LA VICTORIA.

Hoy, hace 72 años, los buenos españoles, derrotaron al comunismo, al socialismo y al anarquismo. Por primera, única y última vez, los españoles, mi anterior generación, tuvieron el valor y la fuerza de vencer al duro comunismo de la Unión Soviética. A sus aviones; a sus cañones; a sus comisarios políticos –instructores de asesinos como Santiago Carrillo y un largo etcétera- y a las Brigadas Internacionales, reclutadas por los soviet diseminados por todo el Mundo.

El día 18 de julio de 1936. Comenzó la Gesta: el Alzamiento Nacional, prácticamente con lo “puesto”. Las topas nacionales apenas tenían armas; los rojos muchas. Las tropas nacionales no tenían barcos; los rojos la práctica totalidad de la flota, y los puertos –en Cartagena la base de submarinos-. Los nacionales no tenían aviones; los rojos además de aviones, tenían los aeródromos. Los rojos tenían las zonas industriales, las agrícolas, las ganaderas y por tener, hasta tenían el oro y la plata del Banco de España.

Todo eso, y algunas cosas más, se las hicieron ver a Franco: “Excelencia; ellos, los rojos lo tienen todo”. “Si, ellos lo tienen todo, pero nosotros tenemos la razón”.

Hoy, asomado a la ventana de mi habitación, miro, y en la gente que veo pasar por la calle, no reconozco el espíritu inconformista de aquellos jóvenes que, como en Valladolid, y en otros lugares de "aquella nuestra Patria", el día 18 de julio de 1936, se lanzaron a tomar la calle al grito de ¡¡¡ARRIBA ESPAÑA!!! Muchos de ellos murieron con la esperanza de que sus vidas sirvieran para que floreciera una nueva Grande y Libre España. Desgraciadamente con sus vidas se fue su sangre hirviente de patriotismo. Ese combustible, en estos momentos en España, brota muy tenue, apenas perceptible. De aquella sangre hubo gotitas que a algunos de nosotros nos salpicó, y las guardamos con todo nuestro amor, ya que junto con el sacrificio, los supervivientes nos legaron los cuarenta años de paz y libertad. A los caídos por España; José Antonio y Francisco Franco, que siempre estarán presentes: Gracias.

En el día de hoy, cautivo y desarmado…