Pido a Dios, nuestro Señor, que nos eche un ojo porque, con lo que el presidente a retales nos amenaza, los españoles vamos a ir de culo y cuesta arriba.
¡Qué cosa tan triste y perniciosa! La "flor y nata" del país; las personas más capacitadas; las más inteligentes e importantes para el conveniente movimiento de la sociedad española, ha sido sustituida por una mediocre nata de pestilente mierda que no tiene más méritos a resaltar, que el estar asfixiando con su pestilencia a esta sufriente sociedad española.
Quienes dan ciertas noticias en los medios audiovisuales de información y los que lo son en el papel ¿son los mejores profesionales del país? ¡Quiá! ¡Ni hablar del peluquín! En la mayoría de los casos son aquellos que, vacíos de personalidad, ética, estética y moral, se venden más baratos a cualquier bastardo interés. Son la peor especie de profesionales practicantes de la más baja prostitución.
Daría vergüenza verlos, escucharlos y leerlos, si es que los españoles no hubiéramos perdido, por excesivo uso, la capacidad de sentir vergüenza ajena, que se dice, ante un acto sumamente desvergonzado.
Los ataques embusteros que se vienen usando por la casi totalidad de los medios de información contra VOX, solo tienen parangón en los países comunistas: la extinta Unión Soviética ha dejado su semillero bien crecido en Cuba, Venezuela y... ahí me quedo por no alargarme en ejemplos conocidos por todos nosotros. Esos mismos medios de información, corrompidos por partidos políticos, y corruptores de políticos de esos partidos, ahora apuntan su carabinas "tiramierda", contra el presidente recién elegido de Brasil, don Jair Bolsonaro.
Resaltando el peor de sus pecados, por el momento, para el hijoputismo conglomerado de la información, que es la cita a Dios: "Brasil y Dios por encima de todo", en su discurso de toma de posesión.
Y, vas escuchando la radio del coche camino al trabajo, y se tiene que escuchar a una tertuliana decir, sin que se le caiga la cara de vergüenza, el gran temor que le produce el "gobierno del Presidente Bolsonaro, pensando en la mujer brasileña negra y pobre". Dando por cierto que existen muchas personas así.
Y yo, en mi sencillez mental, quedo extrañado de que, después de casi tres lustros de maravillosamente buenos y decentes gobiernos socialistas en Brasil, el señor Bolsonaro se encuentre que existen, bajando de las favelas, andando por las calles de capitales y pueblos brasileños "mujeres negras y pobres",
por las que los tertulianos y tertulianas españoles, secuaces a sueldo de partidos y medios de comunicación, ahora -no antes, con el Partido de los trabajadores en el Poder- sienten democrático temor por sus vidas y derechos.
¡La extrema Derecha! ¡El populismo Fascista! ¡¡¡Tóquenme los cojones!!! En Mayo yo votaré por VOX.
Eloy R. Mirayo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario