jueves, 10 de julio de 2014

SI FUERAN EMPRESAS PRIVADAS, ANDARÍAN DESAHUCIADOS.

Los bancos dan créditos a los partidos políticos a sabiendas de que no los van a cobrar jamás. ¿Por qué? Misterio inescrutable. El asunto es inescrutable, no porque no se pueda desentrañar, sino porque el "asunto" afecta al contubernio Política-Banca.

Como muchos podréis haber podido leer en el diario El Mundo, no hay un solo partido que no esté cogido por la entrepierna por las entidades de crédito. Todos, todos deben dinero por encima de los ingresos, al punto de que con las subvenciones que reciben del Estado (¡tiene pelotilla!), porque los gastos son astronómicos, no llegan a cubrir los presupuestos anuales. 

Así ocurre que el partido del "Gran Hombre de Estado," José Antonio Duran y Lérida que tiene una deuda acumulada de más de 16 millones de euros (eso que apenas es un moñiguillo de partido) que recibiendo "solamente", del Estado que les roba 3,1 millones de euros, insisto, que no cubren los gastos,  ni siquiera los de hospedaje en hotel de 5 estrellas y dietas de Pepito Antonio, esta claro que nunca, aunque se lo pida el Tribunal de Cuentas, esa deuda se verá saldada y, mas, teniendo en cuenta que las cuentas de los próximos  ejercicios (estos datos son hasta 2012) serán en negativos y la deuda registrada habrá aumentado sensiblemente. 

A pesar de ello los bancos acreedores, sin erizárseles el bigote, le seguirán negociando la deuda, sin importarles el que este año deberá hacer frente a un pago de más de 10 millones de euros, que por supuesto no satisfará, sencillamente, por ser una formación de las mal llamadas "de utilidad pública". Y no es verdad; es una sucia mentira el que se diga que los partidos políticos y los sindicatos sean formaciones de utilidad pública cuando tienen muy demostrado todo lo contrario. Tanto los partidos como los sindicatos son maquinarias puestas al servicio de la "aristocaca" crecida al amparo de la Democaca que estamos sufriendo, que como morcillas entripadas van creando miles de inútiles "ensueldados".

Ninguno de los partidos que encabezan la manada democáquita, si fueran empresas privadas o simplemente deudores de prestamos e hipotecas, andarían desahuciados o contando años en la "Trena."


Según el Tribunal de Cuentas (institución del Estado que, a pesar de estar servida por 700 personas, de ellas 100, parientes -nada sabemos de amigos- de altos cargos, funciona como el culo), UNIÓ, CIU e IU, están en quiebra financiera desde hace 4 años. No nos dicen nada de la cojera del PP y del PSOE.

Uno, o sea, yo, que sé los exagerados requisitos avalísticos necesitados para conseguir un crédito, pregunto a sabiendas que nadie me contestará que ¿con qué avalan tan cuantiosos créditos los partidos políticos? Y también me gustaría saber si cuando las directivas de los bancos presentan cuentas ante los accionistas, los pufos de los partidos, sindicatos y ayuntamientos se ven perfectamente reseñados en las cuentas de resultados y, en el caso que se reflejen escrupulosamente ¿en que tanto por ciento afecta, específicamente esos impagos, al cobro de dividendos?

Desde que tengo uso de razón, uno es así, he perseguido con ahínco el sentarme en el sillón de "súper jefe" con una gorra roja de Ferrari calada hasta las cejas, del más importante de cuantos bancos hay en España, y lo único que he logrado ha sido sentarme en un banco, de piedra, del paseo de la Castellana que, aunque se está muy fresquito en el verano... ¡no es lo mismo!.

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