Gobernar con el pueblo, y no contra el pueblo.

¿Seremos capaces los españoles de salir de esta? Claro que sí, siempre que los políticos que nos han de gobernar, sean capaces en sus cometidos, y no precisen de tantos consejeros como los inútiles que nos vamos a quitar de encima.

También es de desear que comprendan que deben gobernar con el pueblo, y no contra el pueblo, como lo hicieron durante siete años y medio, los inútiles que nos vamos a quitar de encima.

Una de las primeras reglas que han de asumir es que el dinero del Estado es de alguien; de los españoles, que les ponemos en la mano, no para malgastarlo en una interminable orgía de gilipolleces, como hicieron los inútiles que nos vamos a quitar de encima.

Los españoles estamos impacientes por comprobar que ustedes, señoras y señores del PP, con infinitamente mejor preparación intelectual que los inútiles que nos vamos a quitar de encima, son capaces de hacer, con el sacrificio por parte de todos que sea necesario, la vereda por donde nos saquen de esta lamentable situación en la que nos hallamos.

Esperamos que, en sus prioridades, como medida urgente, ponga énfasis en reducir el gasto público,  aunque por ese camino no se solucione todo el gran problema de nuestra deuda, si contribuirá en paliarla. Un buen paso adelante, sería aumentar los ingresos fiscales, sin aumentar los impuestos sino facilitando el crecimiento de la economía. Muchos somos los que creemos que esa es la única salida para alejarnos de la crisis económica, de la deuda y de la crisis bancaria.

España, por la caída de nuestra industria, en estas dos últimas legislaturas, hemos perdido capacidad de exportar; sería deseable que, desde los ministerios de Industria, de Exteriores y Hacienda, allanaran, ayudaran  e impulsaran nuestros productos, porque, sin intentar engañar a nadie, creo que colocar nuestros productos, es una de las pocas salidas que tenemos para remontar la caída en picado en la que nos han colocado los inútiles que nos vamos a quitar de encima. Por la labor vigilante, importante labor, de estos tres ministerios, deben salir  nuestros productos, impecables en calidad, diseño, al tiempo que se busque una buena distribución; ya que tendremos que enfrentarnos con la presencia del dólar americano, un cuarenta por ciento más barato.

Y, después de unas medidas de economía expansiva, han de meter mano en la economía doméstica, la de las autonomías, diputaciones y ayuntamientos; sin olvidarnos de los gastos suntuarios de los políticos, que si no son decisivos, nos jode cuando nos enteramos de que algún “chorizo”, se gasta 3.000 euros en un burdel.

¡Ah! Y, que no se olviden de retorcerle la mano a los bancos; el asunto de las hipotecas…