lunes, 12 de diciembre de 2011

Al Infierno con todos ellos.


¡Por fin una buena noticia! El gobierno balear ha decidido quitar la subvención a las clínicas abortivas de aquella autonomía. Esta es la parte positiva de la noticia, la negativa es que las demás comunidades autonómicas, como el anterior gobierno de las Baleares, también están subvencionando clínicas abortivas. De las que estuvieron bajo el yugo socialista, o separatista, enterarme no me causa asombro, quien si logra desconcertarme son las autonomías que se gobiernan con las siglas del PP, pues, como todo los españoles sabemos, hay un recurso contra la ley actual, interpuesto por la nacional de aquel partido político, que no se ve nada reforzado con esas subvenciones.

La Generalidad de Cataluña subvenciona dos abortorios, siniestra palabreja, con 500.000 euros por asesinar 1.068 nonatos: Clínica d`Ara-Agrupació Tutor Medica, y el Centro Casanovas de Ginecología y Planificación Familiar S.J.

En Castilla-La Mancha, los abortorios no trabajan para el gobierno autonómico no porque las autoridades hayan tomado ejemplo de Baleares, sino porque no hay dinero para pagarles.

En La Rioja, pagan los abortos que mandan a las Vascongadas, recibiendo en su sanidad a los enfermos del territorio vasco, próximos a aquella comunidad. Es otra forma de subvencionar abortos.

Madrid, que la señora Esperanza Aguirre dice estar totalmente en contra del aborto, anda por ahí un lista en la que se explica que su gobierno subvenciona abortorios por valor de 1.000.000 de euros.

Y podíamos seguir enumerando una por una, todas las CCAA, porque todas ellas, de una u otra manera, están subvencionando el crimen más cobarde: asesinar a una criatura, sin posibilidad de defenderse, por razones obvias –¡ay si los fetos tuvieran en cada mano un Colt 45!-. Esta es una de las más notorias señas de identidad de las adelantadas sociedades democráticas del ¿Primer Mundo?; este asesinato con todos los agravantes éticos y morales, es el que reyes, como nuestro Juan Carlos I, y la mayoría de los presidentes de gobierno de ese “mundo”, sancionaron con su firma. Pues, que no crean que esa barrabasada les saldrá gratis; llegará el día que Dios, nuestro Señor, tomará las medidas que crea más adecuadas. Pero, si  a Él le sirve de algo, yo le digo, ¡Al Infierno con todos ellos, y ellas!

Me comenta un buen amigo y mejor persona, a pesar de que tiene un hermano senador, que en los partidos políticos no aceptan a nadie que no pase la última prueba, la más difícil de pasar, que consiste en que el postulante ha de mostrar a satisfacción de un severísimo tribunal interno que en su cerebro no hay ni un átomo de vergüenza, ni el más mínimo sentido del ridículo; la falta de ambas cosas, es lo que identifica; es la "denominación de orígen" de la gente de esa “casta” que ya nos va pareciendo maldita. Así vemos con harta frecuencia como el mismo político, o el mismo partido, puede aprobar y condenar la misma cosa, en el tránsito de escasos segundos sin ruborizarse.

Doña Esperanza Aguirre, demuéstreme que tiene vergüenza; quite las subvenciones a los abortorios. 

1 comentario:

Rafael C. Estremera dijo...

Temo, Eloy, que la noticia no sea tan buena.

Entre las habilidades de estos sinvergüenzas fugura en lugar destacado la de la verdad a medias -mentira doble- y la vaguedad.

La realidad es que en Baleares se dejan de subvencionar clínicas abortistas, sí; pero porque van a hacer los abortos en la Sanidad pública, buscando los médicos para ello donde haga falta.

La noticia la da el Diario de Mallorca

http://www.diariodemallorca.es/mallorca/2011/12/08/govern-garantiza-sanidad-publica-asumira-abortos/726492.html?utm_source=rss