El Bipartidismo Político, se ha convertido en la fórmula infalible y sencilla, exprofesamente creada para robar alternativamente (hoy yo, mañana tú, alternando, el dúo PP, PSOE, llegando además a la entente cordiale de utilizar el sistema del robo a piñón fijo, sin altibajos que pudieran alterar los presupuestos internos de esas dos partidas choriceantes… de primera división !eh!) indiscriminadamente a todos los españoles, de infinitas maneras, alguna de ellas puritita invención aun por estrenar, cuestión de tiempo, pues están tan entretenidos, tan cómodos usando las ya conocidas…
por cierto ¡todas ellas exitosas! Y sin temor a represalias judiciales, una vez que, entre ambos partidos (reparto más o menos equitativo), tienen atada y amordazada a la Justicia, utilizando las “papeletas” del Indulto y la Amnistía.
La bondad del bipartidismo con la que intentan hacernos creer a los españoles que se nos “hace un hijo cura”, no pasa de ser más allá que otra escenificación del “timo de la estampita”, por bien que interpreten, y les queda como un guante, el papel de gilipollas del bitimoteros. ¡Ya no nos la dan!
Cincuenta años viendo la misma película, son muchos años, para que triunfe la excusa de no saber de que va el argumento, teniendo en cuenta que, desde el primer momento, nada más apagar las luces, antes de verse el título en la pantalla, nos metieron la mano en el bolsillo y se llevaron la cartera: los derechos naturales, las costumbres ancestrales, la tranquilidad, el orden, y de manera absoluta, la libertad, cercándola de prohibiciones hasta llegar a la asfixia… ya veremos si recuperable.
Eso nos lo dirá, si ponemos por delante el sentido común, el resultado de las próximas Elecciones Generales, esta vez, ¡ojo! sin trampas. ¡Hay que romper el bipartidismo poniendo un lazo verde a España!
Eloy R. Mirayo.
