domingo, 2 de noviembre de 2025

ENGAÑADO AL CIRCO.

Y qué mal les ha caído a los senadores no rojos, el que Sánchez, expresándose en su natural estilo, muy acorde con esa especie de chulería necia y cuasi delincuencial de quienes se han educado, en la última etapa de su bisoñez, y siguen en ello, en el gozoso roce constante con la sórdida prostitución -a veces prostituido y otras prostituyente-, a dos, tres, o cuatro bandas -¡o cinco! ya te digo-, disfrutando de ello no haciéndoles el feo a los muy boyantes beneficios en “chistorras”, en “lechugas”, en “soles”, y tampoco a los distintos alucinógenos, ni al alcohol en general.

Y les acusó a los senadores de “fachas” -¡joooderrr!– y de haberle llevado engañado al Circo. 

Y dicho lo dicho ¡gran hazaña! Teniendo en cuenta… (¡ahí va eso, queridos!) lo que tiene sobre la mismísima chepa -que son su mujer y su hermanito-, es imprescindible “sufrir” de la total escasez de vergüenza. Lo que recalcó interpretando su show favorito, que viene siendo aquello que le está haciendo famoso en todo el Mundo que es, interpretarse a sí mismo, sacando a la luz sus infinitas, insufribles, indecentes y ridículas maneras que conforman su personalidad. 


Y es una verdadera desgracia que no se pusiera, para redondear su falta de respeto a España, a su Senado y a todos los españoles, el atuendo que tan “chuli” le queda -ahí está la ilustración que lo prueba-, que redondeara fielmente la foto del trágico espécimen que ha llegado a presidir todo un gobierno europeo, sin tener cerebro y sin tener corazón. Si, tal como uno de esos robots con los que se está intentando acabar con la clase trabajadora, desde presidente de las más grandes empresas, a los miembros menos transcendentes del servicio de limpieza. 

Al fin y al cabo, esta indecente criatura ya ha conseguido entrar con su Peugeot en la Historia como premio a fabricar toda clase de cabro… 


esas a diestra y siniestra, pues también jode a los que dicen ser de izquierdas. Qué difícil se hace entender semejante bodrio para quienes hemos disfrutado de niño asistiendo al antiguo al Circo Price, en la plaza del Rey, de Madrid, 


riendo limpiamente con la gracia de la mejor troupe de payasos que a nivel mundial hayan existido: Pompoff, Thedy, Nabuconodosorcito y familia. 


Profesionales que presentaba sus espectáculos más artísticos, más amables, más aseados y hasta más entonados cantando con el público infantil, la música que los acompañaba.

Eloy R. Mirayo.