lunes, 11 de abril de 2022

EXTREMA IZQUIERDA, EXTREMA GILIPOLLEZ Y EXTREMA DERECHA.

Es algo que no precisa de estudios en profundidad para identificarlo, porque nítido diariamente nos lo ponen delante de nuestros ojos y se nos introducen por los oídos hasta quedar instalado en nuestro cerebro, los que aun lo conservamos. Lo percibimos en su totalidad, quienes tenemos sensibilidad para ello y también, aunque no sean capaces de identificarlo científicamente, los que carecen de esa necesaria sensibilidad. Ese algo se nos ha establecido en nuestra Patria -posiblemente importada del extranjero-, y que pervive muy cómodo difuminado de ordinario; neutro como personaje de segunda fila, pero que en momentos electorales, de cualquiera de los que celebra la política, aunque no se celebren en España, se hace absolutamente notorio, como doncella en porretas, mostrándose tal cual es, cual lady Godiva, montado en los lomos de los medios de comunicación, como en estos momentos ocurre en las elecciones en Francia, aunque allí todavía no le hayan entregado su carné de identidad.

Me estoy refiriendo a que al día, al menos en España, que es lo que conozco, la política nacional divide su todo en tres fragmentos que son: la Extrema Izquierda, la Extrema Gilipollez y la Extrema Derecha. 

Y en eso, al día de hoy, es en lo que ha quedado la política española después de haber pasado por las manos de los políticos del posfranquismo -¡que no es paja!- y a los continuos retoques a los que el "saleroso guaperas del Ramiro" desde hace cuatro años, como si fuera un objeto de su propiedad, la está sometiendo hasta que consiga, si Dios no media, dejarla a su gusto, a pesar de que sea un gusto muy jodido.

La Extrema Izquierda; esta que participa en el gobierno de nuestra patria, es la que todos sabemos que sigue siendo la actual representante -como lo fue entre 1936 a 1939- del terror rojo suministrado por la Unión Soviética -cien millones de asesinatos, a los que habrá que sumar los asesinatos que Putin está cometiendo en Ucrania- admitidos por La Extrema Gilipollez, en su periferia mas cercana, solamente entendido entre las personas normales por la cobardía; gentes incapacitadas de oponérseles seriamente por el profundo temor que gentes de aquel "percal", les produce a los políticos del extremo gilipollismo, a sus militantes y a sus votantes. Ese; el miedo, es junto a su infinita capacidad de "hacer desaparecer los dineros comunes de los españoles" de donde deberían estar, y encontrárselos en sus cuentas corrientes, son las señas mas notorias de la Extrema Gilipollez.

Y, de las tres partes en las que ha sido dividida la política nacional nos queda la Extrema Derecha. Así aludida con retorcido odio; de manera despreciativa, acompañada de otros motes insultantes como "ultra derecha", "fascista y "nazi", con acusaciones de los dos engendros políticos con los que conforma el indeseado trío, como racista, homófobo, misógino, y un larguísimo etc., simplemente porque, limpias sus manos y limpias sus conciencias les denuncian sus delictivas maniobras contra España y contra la vida -por exagerado que parezca- la economía y los derechos de todos los españoles. 

¡Qué largas, pesadas y dolorosas, después de cuatro años están resultando las catorce estaciones este Vía Crucis que estamos llevando a cabo los españoles!.

Eloy R. Mirayo.


No hay comentarios: